'°•. Aún Al Borde De La Muerte •Squid Game x Tokyo revengers•

• Prólogo •

AU* Sin viajes en el tiempo. AU* Kisaki y Hanma amigos y buenos <3

-

Parejas

-

Ninguno de ellos sabe como llegaron hasta allí menos cuando estuvieron en ese punto de lo que creían tenían controlado, simplemente no lo saben ni entienden. Tampoco creen poder entenderlo, ni él más inteligente de ellos lo hace.

Ellos estaban bien siendo líderes y miembros de una pandilla de delincuentes juveniles (excluyendo a Hina) que no hacían más que pelear; porque ninguno falló tiene algún delito de sangre, de repente todo se vino abajo cuando una noche sus ojos se cerraban sin ellos saberlo y despertaron en un lugar totalmente desconocido, con una propuesta para participar en unos "juegos infantiles" a cambió de dinero.

Kokonoi era el más feliz con eso, es decir ¿dinero por jugar? Pfff, así cualquiera aceptaría incluso sin ser un adicto. Aceptaron porque no le veían nada de malo; solo eran unos jueguitos. Pero, cuando la primera bala llegó, todo  se volvió un caos tanto física como mentalmente y no solo para ellos.

El panorama se basaba en los gritos, el llanto, la sangre, cansancio, los muertos, la canción de fondo, la tensión, adrenalina, lágrimas, miedo.

Por fortuna los 20 lograron salir de el primer juego.

Por eso, decidieron hacer una votación pero ganaron los otros jugadores para quedarse, ellos que querían ser egoístas o se dejaron manipular porque querían el dinero. A diferencia, ellos querían irse porque antes que el dinero querían volver a casa.

¡Kokonoi optó por irse aún siendo un 'amante' del dinero prefirió su vida! Aunque no precisamente la suya, pero siendo consiente de que sus amigos y Inupi estaban involucrados su mente pensaba después de mucho tiempo dejando como algo segundario el dinero. Enfocándose en querer irse de un lugar que podría ser una fuente de ingresos.

Así que siguieron, esperaron a ser menos gente para conforme iban avanzando por fin lograr irse, ese era el plan inicial y el único que podían armar.

Porque no eran tan idiotas como para no darse cuenta que solo 1 iba a salir con vida. Ese era el efecto sorpresa de ese lugar.

Bueno, reiteramos, si eran idiotas y no pensaron en eso, pero Kisaki era mucho más inteligente y les explicó detalladamente más de 3 veces como funcionaba el juego para que entendieran pues no tardó mucho en llegar a esa conclusión.

Se dividieron en equipos con algunos extras (algunos de los más fuertes con los otros del lugar para asegurarse de no perder ya que 4 quedaron solos.)

Antes del cuarto juego decidieron que iban a  hacer una votación, pero les ganaron en tiempo y ya los tenían en una habitación Blanca con órdenes de elegir a un compañero de confianza para el siguiente juego.

Kisaki sentía una mala vibra con todo eso, aunque no podía decir que sería esos juegos eran tan impredecibles como Takemichi. En su punto de vista.

—Bien.. ¿Vamos, Kenchin?— Se levantó Mikey de su círculo amistoso, Draken sin medir palabras solo lo siguió. El dúo perfecto para cualquier cosa.

Chifuyu vio a Baji levantarse y comenzar a caminar en dirección a dónde iban las parejas que estaban listas, sin necesitar una confirmación sonrió y se levantó para seguir al más alto.

Porque el iría a dónde sea que estuviera Baji Keisuke, siempre detrás de él como la peste negra.

Cada vez quedaban menos opciones, pero de algún modo todos allí sabían con quién iban a quedar.

Kakucho miró de reojo a Izana el cuál asintió para ambos darse la mano y caminar hasta donde estaban los otros esperando junto con dos desconocidos que al parecer estaban listos; eran esposos, los reconoció por hacer juntos en el juego de las cuerdas.

—¿Taka-chan?— Preguntó Hakkai al peliplata, esté le miró con una respuesta clara. —Vamos.— Respondió sonriendo mientras le ayudaba a levantarse.

Hina resoplo levantándose para tomar la mano de su pareja, Takemichi, y ambos corrieron para posicionarse. Porque ella sabía que el no iba a pedirlo primero, y en cierto modo, era lo que le gustaba de él.

—¿Vamos, idiota? Soso no quiere participar conmigo.— Preguntó Nahoya a Ran, el cual soltó una risita amarga por el puchero, no estaba de humor para reír, de hecho nadie lo estaba pero era lo único que podían hacer en una situación así. Además, Smiley estaba acostumbrado a sonreír casi siempre por lo que Ran podía hacer lo mismo por el ¿no? Después de todo era el único que había notado que Nahoya perdió su sonrisa.

—¡RinRin!— Llamó Souya al Haitani menor, esté le miró y aceptó que vayan juntos un poco avergonzado, lindo.

—Supongo..— Murmuró Kisaki con la vista en otro lado al sentir la penetrante mirada de Hanma encima de él por ya unos minutos, no era nada sutil y el mensaje que le mandaba era una clara propuesta de participar juntos en eso.

—¿Vamos?— Preguntó el rubio de cicatriz mirando a Hajime, este se lo pensó unos minutos para asentir con la cabeza y salir dejando solos a Sanzu con Muto.

—¿Sanzu?— Consultó el más alto, el peliblanco sin quitarse la mascarilla cerró los ojos y embozo una sonrisa que nadie podía ver, pero aún así allí estaba y fue suficiente respuesta para ambos.

Porque después de Mikey, Muto era lo más importante para Sanzu.

Habían en total 40 sobrevivientes contando a ellos.

Estaban todos listos.

O eso creían.

La voz resonó en los oídos de los 20 protagonistas.

—"Jugaremos a las canicas.
Cada jugador tendrá 10 canicas, su objetivo es quitarle las 10 canicas a su compañero. Quién se quedé sin canicas perderá. Quién consiga las 20 canincas antes de que se acabe el tiempo, gana. Pueden idear cualquier modo de juego que no incluya violencia. Buena suerte jugadores."—

Y una tormenta totalmente perfecta y horrible se había desatado en ese momento, dejando a todos sin voz y con los sentimientos revueltos además de los pensamientos enredados, ¿qué podían pensar?

Si ya ni siquiera estaban pensando en sobrevivir, ni en volver a casa.

-