El comienzo de un final

Capítulo I

Holaaaaa, el año pasado me invente esta pequeña historia, no es muy buena realmente, no se me da bien escribir, pero de la ilusión se vive.
Es un primer capitulo, tal vez lo vaya actualizando si se me ocurre cosas que añadir.
Disfrutad, o no ... como querías. :)

  -¡Gissele Lison Janie! ¡Vas a llegar tarde! - No entiendo por que todas las madres nos despiertan así ... en fin hora de despertar.

  -¡Ya voy Mamá! - Cuando ya tienes experiencia aprendes a levantarte a la primera si no quieres que sea peor.

  Termino de ponerme el uniforme, que esta formada por una falda cuadriculada con tonos de gris y azul, una camisa blanca y unos calcetines largos azules oscuros. Realmente no es muy bonito pero me veo bien en él.

  Cuando termino bajo corriendo a la cocina y me encuentro con mamá acabando de prepararme un almuerzo.

  -Ya era hora jovencita- me sonrió con ternura como hacia siempre. Su sonrisa era preciosa, entendía como papá se enamoró de ella- Has despertado a tu hermana?

  Cierto, no había dicho q tengo 3 hermanos más. Dos son mayores que yo y una más pequeña que yo.

  -Si mamá, tranquila.

  Me despedí de ella, cogí el almuerzo y me fui a la escuela.

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  Cuando llegué al colegio me puse ha buscar entre la gente hasta que la encontré: una melena negra y lisa, que le pertenecía a una chica alta y de piel aceitunada.

  -! Irka! - En cuanto me oyó se giró y se lanzó sobre mi para abrazarme (literalmente).

  -Ya era hora- me soltó y me cogió de el hombro- Vamos a clase querida.

  Entramos por esa gran puerta que tenia nuestro colegio, que era muy grande ya que había cursos desde 2 años hasta 16.

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  Estábamos en clase de matemáticas -que es mi favorita- y estaban explicando algo que alguien no entendía, cosa que me aburría -generalmente se me dan bien las mates-. Ahora iban a hacer actividades en la pizarra.

  -¿Quien quiere hacer la primera actividad? -una mano salió disparada hacia arriba, como no?: era Charlie, el gran y maravilloso Charlie.

  Nótese el sarcasmo.

  Charlie era al típico listo que al final no daba ni una y que intentaba hacerlo todo más difícil para parecer más listo.
Físicamente no era muy desalineado, pero tampoco era muy guapo: tenia el pelo medio rapado, una cara sorprendentemente fina para su edad, llevaba aparato dental y era bastante alto. Si quisiera podría tener pareja fácilmente ...

  ¿ Eso es una propuesta?

  Mientras salía Charlie a la pizarra me puse a hablar con Irka, no tenía nada menor que hacer.

  Me estaba contando algo de una cena a la que había asistido el pasado sábado, y un chico- alto y con ojos azules- que no paraba de mirarla.

  En cuanto me empezó a contar lo que paso después de la cena desconecté. Me quede mirando las horribles paredes de baldosas color celeste, y pensando en todo lo que podría estar haciendo si aún estuviéramos en verano. Yo estaría en la playa -seguramente con Irka-, o en algún campamento de verano.