Perfectly unexpected •Daniel Ricciardo•

1. The night we meet

Salí de mi apartamento dudando en creerle a los meteorólogos y llevarme paraguas o dejarlo en casa. Levante la mano para pedir un taxi mientras me colocaba mi rompe vientos, en definitiva iba a llover hoy.

El día estaba un poco nublado, los rayos del sol apenas se dejaban ver a través de unas nubes grises. Y mientras iba en camino al aeropuerto pensaba en cómo había cambiado mi vida en los últimos 6 meses, había conocido a los ejecutivos de McLaren gracias a uno de mis mejores amigos, que era el segundo ingeniero a cargo de los coches que vendían en serie, un día dándome un tour por las oficinas nos habíamos topado con Mike Flewitt, quien había sido muy amable y de no presentarse como "director ejecutivo" no había pensado que era el. Después de esa plática recibí unas llamadas de su asistente preguntándome si no quería trabajar para McLaren Automotive. Lo más seguro era que Andrés, mi mejor amigo, le hubiera platicado sobre mis estudios a Mike Flewitt.

Claro que acepte y en cuanto pude fui a firmar mi contrato, iba a estar cerca de mi mejor amigo y ¿A quien lo le gustaría trabajar para una empresa tan importante como McLaren?

Después de ese día estuve trabajando como consultora de marketing. Básicamente me encargaba de estudiar como funcionaban los clientes, las redes sociales y la imagen pública de la empresa.

¿Qué hacia ahora tomando un vuelo a Surrey?
Claro después de mi "asombroso" desempeño en McLaren Automotive me iban a ascender a un mejor puesto pero a otra división de McLaren, la Fórmula 1.

Debo reconocer que sabía muy poco de la Fórmula 1. Mi hermano y su esposa eran muy fans y a veces me invitaban a las carreras o se juntaban a verlas por la tele, pero era realmente poco lo que conocía.

Un "llegamos" del conductor me distrajo de mis pensamientos, le agradecí, le pagué y baje del coche con mi pequeña maleta.
Iba con buen tiempo así que decidí parar a comprar un café y un panecillo para desayunar.
Sentada en la sala de espera del aeropuerto recibí una llamada de mi mejor amigo Andrés:

— ¿Hola?— le dije poniendo mi celular en la oreja.

—Hola ¿Cómo vas? Ya te extrañamos aquí en Londres!—

—Jajaja bien, justo acabo de llegar al aeropuerto, o sea que sigo en Londres!— le dije burlándome un poco.

—¿No estás emocionada? Suenas un poco seria ¿Todo bien?— me dijo un poco serio.

—Si, todo bien! Solo que estoy muy nerviosa, empiezo algo nuevo y no vas a estar ahí para apoyarme!— dije en una forma de "puchero"

—Tranquila, te irá muy bien! Confía en ti! Y sobretodo márcame si necesitas cualquier cosa ¿okey?— me dijo con esa voz de saber de lo que se está hablando.

—Gracias, de verdad que siempre sabes que decir! Te quiero! Y creo que te dejo para subir al avión— le dije al darme cuenta que ya estaba mi número de vuelo en la pantalla.

—Suerte! Y solo una cosa antes de que me cuelgues. Te estuvo buscando Frank hoy en la empresa. Obviamente no le dije nada de dónde estabas, pero ya sabes que si te llama lo ignores. Te quiero! —cortó la llamada sin dejarme responder.

Frank fue mi novio desde que empecé mi carrera, meses después de entrar a McLaren habíamos tenido muchos problemas por los horarios de mi trabajo y los constantes viajes que tenía que hacer con la empresa. Esto había tensado mucho la relación y había aumentado los celos de Frank, que creía que lo estaba engañando con algún compañero o un extranjero. Después de muchísimas peleas y mucho dolor habíamos decidido terminar.

Frank había estado en el momento más bajo de mi vida, el día que mis padres tuvieron un accidente y fallecieron. Después de ese día viví con mi hermano por el resto de mi carrera y Frank fue mi pilar de apoyo mucho tiempo. En verdad me había dolido dejar nuestra relación pero era demasiado tóxico seguir ahí.