///2. Desaparición y Comienzo Nocturno///

1.5K 121 125
                                    

Con una mirada cansada, y el cabello un poco despeinado, fui a por mi bolso en la sala de empleados

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Con una mirada cansada, y el cabello un poco despeinado, fui a por mi bolso en la sala de empleados.

Cuidar niños no era parte del trato, pero solo es por hoy, QUE BUENO que solo es por hoy.

El turno matutino al fin acabo, así que en unas horas más comienzo con el nocturno. Necesito prepararme mentalmente para ello, y traer café conmigo.

MUCHO café.

Me detuve a mitad de pasillo al escuchar, lo que parecía ser, el llanto de una mujer. Con curiosidad y un poco de preocupación, me acerqué hacia donde ese llanto provenía; ella estaba en la sección de piscina de pelotas, hablando con uno de los guardias matutinos.

Bueno, hablando no, más bien gritando o reclamando. Los 2 conceptos caben.

—¡Por favor tiene que ayudarme! ¡Mi pequeño no ha aparecido, y llevo 1 hora buscándolo!

—S-Señora, yo solo vigilo-

—¡Exacto! ¡¿De qué sirve que ustedes vigilen si de igual forma los niños se pierden?! —ella dijo en desespero mientras apuntaba recriminatoriamente al guardia; ya se encontraba incómodo con la presencia de la mujer.

Mi instinto me decía que no debía meterme, no quería tener más problemas por los cuales preocuparme, así que como siempre, seguí mi instinto y di la media vuelta para retirarme, o eso fue hasta que ella volvió a hablar.

—¡No solo mi pequeño se perdió! ¡6 niños más también! ¡Y parece que solo hacen vista gorda de ello! ¡Justo en la inauguración, ¿y ya hay tanta inseguridad?! ¡¿Qué demonios le pasa a su empresa?! —¿6 niños?, eso ya es preocupante.

Me acerque al par, el guardia parece aliviado de que haya aparecido; no le di importancia a sus gestos alegres y me dirigí con preocupación a la mujer.

—Disculpe mi interrupción, pero siento que he oído mal, ¿acaso usted dijo que 6 niños están perdidos? —la mujer me miró, con sus lagrimas y rímel cayendo por su cara; desesperada.

—¡Sí! ¡Con mi pequeño son 7! —asentí comprendiendo, ya no logrando sentir la presencia del guardia que antes la atendía.

"Pff, irresponsable"

—No se preocupe, yo le ayudaré a buscarlos.

—¡¿Enserio?! ¡Muchas gracias de verdad! —asentí con una sonrisa pequeña e incómoda.

A pesar de que no me gustaba mucho que me agradecieran por favores como estos o cualquiera, igual me hacía sentir bien que su cara angustiada pase a una más esperanzada.

Porque la esperanza es lo único que se pierde.

La mujer buscó rápidamente en su bolso, y de ahí sacó una foto. De quien supongo, es su hijo.

Pequeñas Distracciones [Vanessa x Fem. Reader]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora