AMOR Y FAMA...Jimin, Eunwoo Y Tu

EL VIAJE

Narra T/N

Me desperté con una gran sonrisa en los labios, para mí era como un sueño del que no quería despertar, era fantástico, si se lo contará a un amigo no me creería, en ese momento caí en cuenta que debía despedirme y dejar todo organizado en este país, para poder viajar sin problemas, en cuanto al papeleo, la fundación se estaba encargando de todo, pero si debía entregar la casa donde vivía en arriendo, dejar los muebles y demás en algún lugar, junto con mi vehículo.

Así que llame a mis padres, los invite a almorzar, durante el almuerzo les conté todo lo que había sucedido hasta ese momento y les dije que viajaba proximamente hacia Corea.

Se quedaron estupefactos, mi madre lloró y me dijo que tenía mucho miedo de que todo eso fuera un fraude y que me pasará algo malo, que había mucha gente estafando a otros y aprovechandose de las necesidades; recordé que el miedo nunca me llevo a un buen lugar hasta ahora y no iba a tomarle importancia a los comentarios negativos de mi madre, estaba decidida y se lo hice saber, que nadie me haría cambiar mi opinión; mi papá como siempre me dijo que era mi decisión, pero que no dejará de estar en contacto con ellos.

Al siguiente día, organizamos el transporte de mis cosas personales a casa de mi madre, entregué la casa donde vivía y cualquiera diría que me sentiría nostalgica, pero en realidad, me sentía aliviada, nunca fui reacia al cambio y hoy no sería la excepción, sabía que todo iría mejor.

Me llamaron de la fundación para avisarme, que debía presentarme en el aeropuerto la siguiente madrugada, para viajar a Corea, así que aproveche para despedirme de algunos conocidos, y esa noche me quedé en casa de mis padres.

A la madrugada, nos organizamos y salimos con mis padres al aeropuerto, al llegar allí nos encontramos con El Sr Lee, al que aproveche para presentarle mis padres, a la señorita Kim y la Señora Yoo.

Me entregaron el pasaporte y tiquete de avión, era la primera vez que viajaría en avión, así que estaba nerviosa, realizamos el check-in, me despedí de mis padres, al igual que todos los viajeros quienes los habían acompañado, y nos dirigimos a la sala de espera para abordar el avión.

Apenas anunciaron el vuelo a Corea, abordamos y tomamos rumbo a nuestra nueva vida.

En el avión tuve que compartir asiento con una par de chicas que iban a estudiar periodismo, estaban muy emocionadas, se la pasaron hablando gran parte del camino, yo como oso en invierno decidí dormir en gran parte, el resto del tiempo lo dediqué a la lectura acompañada de mi playlist y mis audífonos.

Al llegar a Seul-Corea, en el aeropuerto ya se notaba el cambio cultural y para todos fue como un gran descubrimiento, la buena atención en el avión y el aeropuerto.

Nos recogieron en vehículos dónde nos separaron de acuerdo a nuestra vocación, ya que el Sr Lee nos informó que de acuerdo a esa selección, así viviríamos en casa separadas y en diferentes ubicaciones estratégicas para poder estudiar y practicar cuál fuera el caso, de acuerdo a ello, yo viviría con Mafe y Liz.

Al momento que llegamos, alguien más se presentó con nosotras

???: Hola yo soy Nan sujin, y seré su manager de ahora en adelante.

Es un placer conocerlo contestamos al unísono

El Sr Nan era un hombre delgado, no muy alto, cara amable y cordial.

El Sr Nan muy amable, nos enseñó la casa; era muy elegante y grande, tenía apenas las tres habitaciones para nosotras, un cuarto adecuado para sala de baile, un estudio insonorizado para práctica vocal y un mini gimnasio en casa.

Nos indico nuestro itinerario de ahora en adelante, que incluía, clases de Coreano, técnica vocal, baile y entrenamiento físico.

Nos explico que la programación estaba Dada para que se llevará a cabo durante 6 meses y ya cumplido ese tiempo, deberíamos dominar bien el Coreano y estar perfectamente preparadas para audicionar en compañías musicales.

Al día siguiente muy temprano iniciamos el intinerario con entrenamiento físico, luego era la clase de coreano, luego técnica vocal y finalizabamos agenda con clase de baile, todo con instructor solo para nosotras tres.

Había un solo día en la semana que teníamos descanso y nos permitían salir de compras y a conocer Seul; el Sr Nan siempre nos acompañaba amablemente, y como las inseparables no me permitían acercarme como amiga, solo llevabamos una relación cordial y de buena convivencia
en casa;  pero fuera de ella eran ellas dos y yo detrás con el señor Nan, que siempre estaba presto a charlar, lo que me permitió entablar una amistad y confidencialidad que después agradecería inmensamente.