❥ - Kyomi Haruki, una chica feliz y "normal", claro, ya no sabe lo que es normal y lo que no..
✿- Es una nueva estudiante de la prestigiosa Academia de Héroes U.A, pero descubrió algo más interesante, que le hizo recuperar la poca fe que le quedaba...
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Narradora:
Los entrenamientos y clases concurrieron de forma normal, y aburrida, por parte de varios estudiantes. Pero al fín llegó la hora de la salida y todos empezaron a hablar y guardar sus cosas
— Ya pueden ir saliendo... No olviden realizar las páginas 18 y 19... — Dijo el hombre azabache a sus estudiantes, los cuales iban saliendo
— Que bueno.. — Murmuró la joven de ojos bicolor guardando sus libros
— Excepto usted señorita Haruki, necesito hablar con usted — Dijo el azabache
— ¿Uh?... ¿De acuerdo? — Dijo la ojibicolor sin rechistar y esperó a que todos salieran
Luego de que todos salieran, la ojibicolor se acercó al azabache, un poco confundida
— ¿Sucedió algo Dad-zawa? — Cuestionó usando su apodo la joven
— En realidad, sí... Dime.. ¿Por qué estás aquí?.. — Interrogó el hombre
— ¿Qué? — Dijo la chica con confusión
— ¡Que me digas por qué estás aquí, Kyomi! — Exclamó con enojo el hombre
— ...Para ser una heroína... Y cumplir mi palabra.. — Dijo la chica bajando la mirada
— Exacto. Y no para usar tus poderes de forma imprudente. Ni para pelear con el primer chico que encuentres.. ¡Ésta no es la calle Kyomi! —
—...Esa no fue mi intención, ¿sabe? ¡Nada de eso fue mi intención! ¡Lo estoy intentando! ¡Y No hubiera hecho nada "imprudente" con mis poderes de no haber sido por ese chico! — Se defendió la chica, frunciendo el ceño
—... — El hombre se quedó en silencio, dado a que sabía que uno de sus estudiantes era muy problemático, y que sin dudas le gustaba pelear, luego soltó un suspiro pesado— Como digas... —
— ¿Algo más?.. — Dijo la chica, ya harta de la vida
— Si... Aquí está el mapa de los dormitorios de la Academia, la llave de tu cuarto y... Esto — Dijo entregándole los objetos mencionados y un pequeño paquete a la chica— El Director Nezu me pidió que te lo entregue.. —
— Hmm.. Dígale que le agradezco.. —Dijo con una pequeña sonrisa la chica, guardando todo — Y que los profesores que contrata son muy gruñones.. —Bromeó y lo miró con mala gana
— Tsk.. Deja de quejarte y ve a tu dormitorio, mocosa.. —Dijo el hombre y le dio un leve empujón
— Primero debo estar todo un día en la escuela, ¿¿y ahora vivir en la Academia? ¿¿Aún sigo viva luego de eso?? — Dramatizó la chica mientras salía del salón
