Aaliyah.
Y aquí ya todo se irá al carajo:
—Es un cabron, ¡lo odio! —Skye agarró un vaso que estaba en el escritorio e lo estrelló contra la pared: había encontrado a su novio —Zack— metiéndole la lengua en la garganta a Melody.
—Skye —dije su nombre advirtiéndole.
—Siempre le di todo. Siempre aguante todo lo que me hizo. Entonces... ¿qué hice mal, Aaliyah? Debería ir con el. —se acercó a la puerta a zanjadas.
—¡Skye! no persigas a quien se fue, no es orgullo:es dignidad. Si quiere algo ya volverá, pero tú —la apunté — No persigas.
Entonces la pelinegra se derrumbó.
《Ash, tú y tus palabras absurdas.》
Eh.
La tomé de un brazo y lo pasé por mis hombros, arrastre mis pies hasta un pequeño sillón que había en una esquina y la dejé caer.
—Luego la llevaré a su casa —mire por el rabillo de mi ojo.
—Paso, mejor la llevo yo —medi la vuelta para encontrarme con Erick: esté estaba recargado en el umbral de la puerta con las manos en el bolsillo.
Bufó.
—¿La llevarás así? ¿En tu moto? —preguntó cómo si fuese absurdo.
—Ajá —mire a mi alrededor buscando un palo o algo útil.
Mis ojos brillaron con malicia al ver un bate encima de una estantería.
Lo tomé e intenté salir pero entonces Erick me tomó el brazo.
《¿A CASO NADIE ME IBA A DEJAR EN PAZ?》
—Déjalo ir —exigí frustrada.
—¿Qué tramas? —sus ojos verdes me miraban con diversión, tenía un brillo que los hacían ver especial.
Bruscamente me safe de su agarré.
—¿Conocés a Zack, verdad? —le di una falsa sonrisa, haciendo que esté mirará mis labios.
—¿Si?
—¿Sabes si tiene coche? —levantó una ceja.
¥
Ay si...
《Ay no》
Mire otra vez el Mercedes color negro que tenía enfrente.
—¿Estás seguro qué es éste? —le hablé a Erick.
—Claro.
Era un auto muy lindo para un chico cómo él, hasta me daba pena arruinarlo.
《Pero la vida es injusta así que a la mierda.》
Apreté el bate de béisbol en mi mano, lo levanté tomando impulso y lo estampe contra de vidrio de la ventanilla, haciendo que este reventara.
Mire a Erick, me miraba atónito, sorprendido con tenía los ojos muy abiertos.
—¿Q-qué haces? ¿Acaso quieres morir? —balbuceo.
Sonreí cuál loca.
Volvi a golpear todas las ventanillas haciéndolas añicos, me subí al capó e hice lo mismo con el parabrisas.
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Ambición [En Proceso]
RandomAmbición: " Aquí no hay que confiar en nadie, ni siquiera en mí ".