Reasons to keep loving you [Threeshot] ಇ ls

Parte 3

Sintió la decepción en el fondo de su estómago, tal vez debería esperar unos cuantos minutos más o simplemente ir a cambiarse, pero tenía la esperanza de que Louis pareciera por esa puerta y fueran a la cita que ya habían acordado. Se había tomado el tiempo de arreglarse, salió más temprano del trabajo para buscar la ropa perfecta, verse bien para su esposo y checar bonitos restaurantes donde pudiesen ir esa noche, pero ha pasado una hora desde que Louis tendría que haber pasado por él para poder ir a su cita, pero parecía que se lo había pasado por alto. Se sentía tan decepcionado en este momento y miles de escenarios, nada bonitos, cruzaron por su cabeza y aunque intentaba alejarlos por completo seguían volviendo.

Y estaba enfadado, muy enfadado con Louis. No sólo le prometido tener una cita romántica después de mucho tiempo que no lo hacían, sino que también había prometido reducir sus horas y parece que no está dispuesto hacer cambios. Simplemente tenía que tomar una decisión importante, porque no está dispuesto hacer el único que priorice su matrimonio, porque es cuestión de ambos. Habían sido una semana caótica y tan frustrante, tan triste, tan diferente. Para empezar se dio cuenta de lo roto que estaba su matrimonio, en que olvidaron una fecha especial y luego se sintió como si hubiesen vuelto a comenzar, no va a mentir, sentir de nuevo los brazos de Louis a su alrededor, sus suaves palabras detrás, fue como empezar de cero, se sentía tan familiar y tan raro y las razones cruzaban unas tras otras, que solo le daban la certeza de hacer un esfuerzo por recuperar su matrimonio, pero no solo quiere ser él único que deje todo de lado, que haga los cambios.

Dejó caer la cabeza sobre sus brazos sintiendo las lágrimas asomar y la presión de la decepción en su pecho. Deslizó su teléfono cerca sólo para comprobar una vez más la hora. Media hora más había pasado que Harry ya no creía que la cita siguiese en pie o que Louis incluso se hubiese acordado. Dejó las llaves de su casa sobre la isla de la cocina y caminó lentamente a su habitación, se había cambiado para nada. Pegó un salto y un pequeño grito cuando fue tomando de la cintura y esos labios besaron su cuello. Tuvo que tomarse de las manos de Louis para no terminar regañándolo.

—¿Dónde ibas?—Louis murmuro aún trazando besos húmedos en su cuello.

Dejó caer la cabeza en su pecho, girando la cabeza hacia un lado para dejarle espacio a su esposo para que siguiese con sus besos. Dios, simplemente había olvidado cómo se sentía esto, como se sentía cuando Louis lo tomaba de esta manera en sus brazos y dejaba besos que lo hacían sentir que sus piernas pudiesen fallar en cualquier momento. Olvidó por completo lo enfadado y lo decepcionado que se sentía hace unos cuantos segundos y sólo se centro en morder sus labios y cerrar los ojos, disfrutar de las cosquillas se que instalaron en su vientre. Louis apartó los largos rizos que caían por encima de sus hombros para bajar y succionar la piel de ahí, iba a dejar una marca y el castaño lo sabía muy bien por eso lo ha hecho un poco más abajo para que se tapara con facilidad, pero con esta camisa fina y trasparente que llevaba encima era fácil de distinguir a simple vista.

Se aferró al brazo que Louis tenía a su alrededor por encima de su estómago inmovilizado en sus brazos cuando mordió su cuello con suavidad y succionó otra porción de su cuello. Era tan débil cuando se trataba de mimos y caricias que recibe de su esposo o era solo cualquier cosa que reciba de él. Tan débil que se olvidó de su cita y de las molestia que lo hizo pasar antes.

—Uhm hueles tan bien—Louis susurró en su cuello—. Te ves tan precioso. ¿De verdad quieres salir ahora?

Abrió los ojos antes de apartar el brazo de Louis cruzándose de brazos, ahora con la cabeza despejada podía pensar con claridad. Se fijó en la manera en que Louis venía, tan guapo y tan peinado como se fue al trabajo.

—Ahora ya no lo sé—dijo con molestia—. Se supone que tendrías que haber estado aquí hace una hora y media y a penas te apareces. Prometiste qué harías cambios y mira. Louis, si solo seré yo él que hará esos cambios, creo que será mejor qué.