💗 CAPÍTULO II 💗

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Cuando me desperté, me di de cuenta que eran las 8:00 de la noche, salí de mi habitación, la casa estaba oscura, fui hasta la cocina y vi la comida que había preparado Sakura, todavía está caliente.
Ahí me di de cuenta que no hace mucho que se fue, probé esa comida y fue como un manjar, estaba deliciosa.
Una decabellada idea paso por mi cabeza, sí, así cocina no quisiera imaginarme como lo hace en la cama. Ese pensamiento fue mi perdición, termine de comer y me dispuse a tomar una ducha. Estaba en el baño, deje la puerta entre abierta, porque sé que estoy solo. Me encontraba debajo del agua, pero solo me imagine a Sakura, y mi amiguito se volvió a poner duro, no tuve mas que masturbarme pensando en ella, hasta que sin querer empecé a gemir y decir el nombre de ella. Cuando llegue al climax dije su nombre en un gruñido, eso me relajo y mucho, terminé de ducharme y me fui hasta mi habitación. Tenía la toalla envuelta en mi cintura y con otra estaba secándome el cabello, hasta que sentí que alguien me toco la espalda con la uña de arriba hasta abajo,.eso me hizo erizar, me volteé a ver quién era, pero me quede en shock.

—¿Qué... haces... aquí? —le pregunté con asombro.

—Yo, nada solo quería verte Sasuke, -—se me va acercando poco a poco— ¿por qué estas tan cayado? no te gusta que este en tu habitación —me mira con un brillo en los ojos y sonrisa que, catalogaría malvada.

—No-no... es es-eso... —me aclaró la garganta—, ¡no puedes estar aquí, me estoy vistiendo!, no te das de cuenta, así que te pido, por favor sal de mi habitación —doy tres pasos hacia atrás, ya que quiero estar encima de ella penetrándola.

—¿Por qué no?... yo solo quiero hablar contigo —se acerca más y más, mientras tanto yo voy retrocediendo como un tonto, hasta que choco con la pared. —¿Te gusto la comida que te deje? —me pregunta sin dejar de verme a los ojos.

—Sí, me encanto, muchas gracias, pero sal de mi habitación por favor —estoy súper acalorado, ya que su cercanía esta haciendo estragos y no sé, si podre controlarme. —Podemos hablar en la sala, cuando este vestido.

—¿Por qué no lo hacemos aquí, nadie nos va a oír? Recuerda que tú, mismo dijiste que estamos solos —muerde su labio inferior sin dejar se verme a los ojos.

—No era que saldrías hoy —le mencione ese detalle, para cambiar de tema, mientras aprieto la toalla para controlarme, ya que estoy respirando aceleradamente.

—Me cancelaron la cita, iba a salir con un amigo, pero me dijo que no podía. Te queria avisar para que hiciéramos algo, pero te vi dormido y no quise despertarte —agacha su mirada y se da de cuenta del como aprietó la toalla.

—En-entonces... has... esta-do aquí, to-do... este rato... —tartamudeo de solo pensar que me haya escuchado masturbándome en su nombre. "Ojalá que no me haya escuchado", —pienso para mis adentros, pero también empiezo a sudar.

—Sí, me estaba empezando a dormir cuando escuché que te estabas bañando, quise esperar hasta que salieras para hablar contigo —empieza a tocarme los brazos—, tienes unos brazos muy grandes, y tu cuerpo me gusta como lo tienes de trabajado —pasa sus delicadas manos de arriba hacia abajo por mi abdomen. Aprieto la mandíbula para no tener pensamientos impuros.

—Por... favor... no me... toques... —respiró con más fuerza—, tienes que salirte y hablamos después.

—No quiero —se cruza de brazos, dandome una gran vista de su escoté, ademas que hace un puchero. —Quiero seguir mirándote, de igual manera que tú lo has hecho conmigo. Yo no te dije nada —ahora me toca el torso— me gusta cómo se siente.

—Para... por favor... —cierro los ojos— o sino...

—¿O, sino qué? ¿Qué me harás?... me vas a castigar por ser una niña mala —se pone de puntillas, alza sus brazos y me toma por la nuca para besarme.

Amor Entre Hermanos... (Historia Corta De Lemon) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora