Todo por ti ; maitake (omegaverse)

Ocho.

Ambos se hallan sentados uno frente al otro. Takemichi le mira enfadado mientras frunce el ceño, y Mikey simplemente se queda estático mirándolo con ninguna expresión destacable en el rostro.

Contra todo pronóstico, el Omega levanta la mano y haciendo uso de toda fuerza le suelta una cachetada.

Mikey no cambia su semblante aún después de que le han volteado la cara con dicho golpe, con la mejilla tornándose de un tono rojizo.

-¿Porqué hiciste eso? ¿Acaso sabes porqué quería verte?-Interroga el Alfa.

Takemichi frunce el ceño.

-No sólo me hiciste daño a mi, si no también a los que solían ser tus compañeros ¿Y me preguntas porqué te golpee? Encima, a quién le importa porqué querías verme.-Aprieta los puños con rabia, conteniendo su cólera.-Tú dejaste las cosas claras cuando marcaste a alguien, o mucho antes de eso.

De repente, Mikey suelta feromonas enfadado, pero Takemichi en lugar de asustarse y cohibirse, hace uso de todo su autocontrol para mantener la compostura y darle a entender que él no se va a dejar tan fácilmente.

-Takemicchi.-Exclama con voz gruesa.-Mi intención no fue marcar a alguien más. Yo... cada vez que pienso en eso.-Se pasa las manos por el rostro con frustración.-Yo... mejor ni te menciono cuánto rencor le guardo a ese bastardo, a pesar de que es mi subordinado...-.Hace una pausa, antes de que algo indebido salga de su boca.-Todos estos años, te he extrañado como no tienes idea, Takemicchi. Tanto que no podía sacarte de mi cabeza.

Aunque la confesión de Mikey es sorpresiva, la forma de decirlo hace que Takemichi sienta escalofríos, pues el Alfa no es capaz de quitar ese semblante inexpresivo y la mirada vacía en su rostro.

-Mikey, si ésta en una invitación para que me quede contigo y que yo te perdone. Discúlpame, pero no puedo aceptarlo.-Exclama para luego apretar los labios.-Por favor, llévame con mi hija para que pueda irme de aquí.

Mikey le dedica una mirada dócil, las feromonas se dispersan y se abstiene a mantenerse cabizbajo.

-Takemicchi, antes de llevarte con ella. Quiero decirte algo más. Y no quiero que te preocupes, la niña está bien.

-¿Qué?.-Takemichi le mira con ojos confusos, sintiéndose descolocado por el repentino cambio de actitud del otro.

-Por favor, Takemicchi. Prometo que te explicaré lo que quieras, pero a cambio, tu también me dejarás preguntarte por algo.

El Omega mira a otra dirección, con duda. Realmente se siente fuera de lugar con ese cambio de emociones por parte del contrario, de la nada estaba enfadado y ahora se encuentra tan apacible como si fuera un cachorro pidiendo perdón. Realmente no le convence para nada.

-Me podrás hacer una sola pregunta, con la condición de que luego me dejes irme.-

Mikey cruza miradas con él.

-Si te dejo ir, entonces estarás obligado a hacer una cosa por mi después.

Takemichi se queda perplejo.

-Entonces, aunque tu resuelvas mis dudas y yo las tuyas ¿No piensas dejarme ir?-

-No. Eso aún no lo he decidido, sólo hicimos un acuerdo por las preguntas.

El Omega se queda en blanco, de una u otra forma tendría que aceptar esa propuesta para que luego puedan llegar a otro acuerdo. Qué complicado. De todas formas sabe que no lo va a dejar escapar tan fácil y todo es un chantaje para mantenerlo por más tiempo ahí encerrado, a estas alturas, sólo desea que se acabe rápido y poder ver a su hija.