A donde vamos...

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El cielo se observa gris, el viento sopla sutilmente desmoronando los petalos de las flores que se encuentran en la acera, un cosquilleo en mi corazón me hace recordar cada fragmento de la vida que me acompaño durante tantos años y me obliga a no rendirme.

Hace tiempo que no observaba las gotas de lluvia caer, estaba estancada tratando de crecer pero mis raices dormían como mis esperanzas, mis pensamientos se mantenían en un solo enfoque y no me dejaban conciliar un descanso.

La respiración se agota, las venas se detienen lentamente y el músculo que distribuye la sangre por el mismo se paraliza. Tuve fe, pero en algun momento el aire se volvió tan denso que ya veia en vano continuar.

Miro a todos a mi alrededor, se siente como en un infinito limbo de desesperación y oscuridad, todos hacen crecer sus raíces, todos vuelven a caminar por ahí y le encuentran un sentido a lo que llamamos vida.

La vida de un corazón poeta.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora