Desde tu aparición lograste llegar a los sentimientos que nunca quise mostrar, todo el miedo que alguna vez llegué a sentir lo convertiste en un impulso para acercarme a ti, y así fue como contigo logré comprender el por qué los huracanes suelen llevar nombres de personas, generabas en mí una lluvia de emociones y sentimientos que con su paso me dejaban en un desastre.
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LOS MENSAJES QUE NUNCA MANDÉ.
SonstigesTanto que pensamos, tanto que escribimos y tan poco que mandamos.