Ambos con la fortuna de poseer el primer lugar académico, tanto de su generación como en general de la institución. Son el orgullo de su universidad.
Pero, contrario a lo que digan fuera de esta, todo aquel que estudie en ese lugar, sabe de primera...
Advertencia: Contenido erótico, +18, sexo explícito.
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Al día siguiente de esa desastrosa confesión. Hua Cheng fue a recoger a Xie Lian a su dormitorio y entraron juntos a la universidad tomados de la mano.
Esto, por supuesto, fue una sorpresa muy, muy grande para toda la institución.
¡Nadie creía lo que estaban viendo!
La parejita se paseaba sin preocuparse en absoluto de nada. Se besaban en todas partes en cada oportunidad que encontraban. Se abrazaban, se acariciaban, se hacían cariños y no paraban de verse uno al otro de forma tan melosa.
— ¡Dios mío! Qué bien se ven juntos... —dijo una chica al ver como Hua Cheng aceptaba que Xie Lian le diera de comer.
— Aún no logro procesar esto...¿Como de estarse gritando pasaron a esto? —un chico miraba absorto a la pareja.
— Ni idea, pero sin duda verlos así es mucho mejor.
Los compañeros de esa mesa, asintieron de acuerdo.
Desde ese día, el resto de trabajo que se tuvo que hacer para la organización de la graduación, lo hicieron juntos.
Ahora mismo, ya faltaba solo mes y medio para que el evento fuera realizado.
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— Dulce ¿Te gustaría pasar la tarde conmigo?
Wei Ying lo miro con una sonrisa y se pegó a él, tomando su brazo y abrazándolo.
— ¡Claro que sí!
— ¿Tienes tareas pendientes? —preguntó mirando fijamente a Wei Ying.
Este se aclaró la garganta y se rió nervioso.
— No...
— Wei Ying.
— De veritas que no.
Pero la mirada que permanecía fija en su persona, se tornó más intensa.
