LOS MERCADERES

revelaciones y amistades

He estado, en este lugar por un día entero, no comido nada, absolutamente nada, cuando desperté nuevamente, veo que estoy aprisionado, pero incluso la prisión es cómoda, pero la verdad es un decir ya que no me siento en una prisión en lo absoluto, si mi suposición es correcta, me metieron en la noche, dormí cuatro horas, aparentemente a mi criterio y tengo como 3 horas despierto. Pero ahora que lo pienso si este es un mundo nuevo, otro diferente, la masa y radio de tamaño del planeta puede ser superior, podrían aver unos 30 o 40 horas para determinar un día, aúnque también hay que contar la velocidad de rotación del planeta. Porque apesar de que estoy hambriento, no lo estoy de una manera tan drástica, porque por lo que vi en el ospital, se me inyectaba suero, para tenerme con vida, eso podría pasar si hubiera estado en coma, después de todo el cambio de Nina, es demaciadó increíble, pero poniendo a la palabra increíble, en el lugar que corresponde, algo que es difícil de creer si te lo contarán.

En este momento estoy sentado viendo el suelo, pensado todo y dando le vueltas a la situación, esa mujer Isabella, la Nina adolescente, el futuro que se me a dicho y el que aparentemente estoy. Es muy increíble todo, pero no estoy preocupado, primero, Nina está bien y conociéndola, si algo malo le pasa a su familia, me lo hubiera dicho al momento, segundo la afirmación de eso por parte de Isabella, tercero me tienen vivo cuando podrían a verme matado, y por si fuera poco no me tendrían es un hospitál si fuera inútil.

Volvió a mi mente esa escena con esa mujer. Pero solo pude soltar un pequeña risa no por lo que hizo sino por una cosa que me dijo...

¿Saltarme las reglas? ¿Porqué? Isabella ya he visto mis posibilidades, de superar este entorno nuevamente, pero hay algo clave que falta y es ¿Para qué y Porqué, podría ser útil a gente del futuro?.

Solo es una especulación pero podría ser forzado agarrar las armas, y luchar, otra es que soy un conejillo de indias, si es la segunda entonces si estoy en problemas, ya que ¿cómo podría escapar y adónde? Si esto fuera una película probablemente vería una brecha, en la seguridad y escape, conociendo a personas, más adelante que podrían serme de utilidad.

Pero no estoy en una película y no creo que esta puerta, talvez de acero como de 8 centímetros de grosor, tenga una forma de abrirla fácil.

Divagaba en mis pensamientos, ordenando posibilidades, ventajas y desventajas. Dije una vez que no me consideraba un genio, pero si alguien astuto y añadiendo determinación,l a no ser aplastado por el sistema llamado sociedad, eso se incrementa exponencialmente mis motivos, es fácil es como un jefe o jefa de hogar organiza sus gastos de la semana, cuanto gana y cuánto pierde. Solo que hay que ver en este caso lo peor, dándome el referí, y si.

¿Y si tengo, que pelear?.

¿Y si tengo, que escapar?.

¿Y si mis compañeros o conocidos vienen, por mi?

Creando y destruyendo argumentos lógicos, pero no ignorado ninguno de ellos.

De pronto escuche un ruido. Era la bendita puerta abriendo. Después vi que un chico estaba delante de mí.

Cabello negro, ojos verdes, y un traje parecido al militar.

Se acercó y me abrazó, yo estaba sentado y no me dio la oportunidad de reaccionar, me que dé atónito, y con esa gran intriga, de preguntar porque me abraza.

–¡Me alegro que estés bien Sorata!.

¿Quién eres? Cuando estaba apunto de preguntar el añade.

–¡Soy Marco, Sorata Marco!. 

Me dice Feliz.

–¡¿Marco?!.