cap 18

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Corrí hacia el mientras gritaba su nombre, el volteo mirándome sobresaltado por mis gritos y detuvo su caminar, yo me mostré frente a él y saqué un libro que obviamente robé de su mesa en clases y le dije que lo había encontrado en un pasillo, él me agradeció, lo tomó, puso el libro en su mochila y se fue al encuentro con 'él'. Desde las lejanías podía escuchar que el micrófono funcionaba a la perfección, me senté en un callejón cerca del lugar de encuentro para poder recibir buena señal del micrófono, su intensidad de percibir los sonidos me dejaba atónito al poder escuchar la respiración agitada de Chile. Cuando llegó hasta el punto, una grave voz hizo aparición, empecé a intentar distinguir esa voz por si la había escuchado en algún lugar antes, pero para mi desgracia a pesar de que si me sonaba similar a la de alguien, no sabía bien el 'quien'. La voz ronca le hablaba de forma extremadamente cariñosa, ocupando apodos tales como 'cariño', 'cielo', entre otros más, estaban en una conversación en la cual 'él' era muy cariñoso y Chile muy cortante, se notaba la incomodidad de Chile al contestar, la conversación no tenía propósito alguno, hasta que Chile le interrumpió, diciendo "ya, por favor dame lo que te pedí, tengo clases ahora y no puedo llegar tarde", posterior a lo dicho por este, se escucha un suspiro seguido a un tono de preocupación "Chile, últimamente me encargas demasiado ¿estás bien? ¿Tus temblores han empeorado a causa de algo en especial? Sabes muy bien que si abusas del medicamento terminaras siendo inmune a este y no tendrás con que detenerlos" Chile con un tono ya colmado de paciencia le dice "ya dámelos, que mierda te importa mi salud" la voz de Chile se mostraba algo frustrada. Luego de aquella 'discusión' el sujeto a regañadientes le entrega el 'pedido' y le dice que se cuide, con un tono un poco desanimado, Chile se despide cortante y se va a paso acelerado sin decir ni una sola palabra, yo me levanto rápido y salgo de aquel callejón para seguir a Chile desde lejos, ahora el tema era conseguir el micrófono devuelta. Sonó el timbre de receso y esperé a que todos salieran del aula, ya todos fuera abrí su mochila y hurgué en ella en búsqueda del micrófono, era tan pequeño que era difícil de encontrar, cuando con el tacto sentí la pequeña pieza, la voz de Japón hizo que mi mundo cayera sobre mí, mi estómago se contrajo y mi respiración se detuvo por unos momentos el solo escuchar "hola Ale ¿qué haces?" Cambio todo el color de mi cara, mi mente Intentaba dar respuesta a su pregunta, pero era difícil, hasta que me calmé y dije "es que estaba viendo por la ventana mientras escuchaba música y se me cayó un audífono en la mochila de Chile ¿y tú que haces por aquí? Hace tiempo no te veía por el instituto" ella entra al aula y se sienta en una mesa al lado de mí "pues.. resulta que Rusia tiene alta posibilidad de recuperar la conciencia y su salud está más estable, así que decidí venir" de mientras ella me hablaba yo tomé disimuladamente un audífono inalámbrico que tenía en el bolsillo y lo tiré dentro "buaa! Que bien que se recupere tan rápido, espero poder verlo por aquí pronto" dije mientras mantenía una cálida sonrisa "que mal, de verdad no lo encuentro" me pongo nuevamente a hurguetear la mochila, Japón intrigada me dice "seguro que no se te-" la interrumpo "lo encontré" tomé el audífono y el micrófono, ya que ambos son pequeños los puse en mi bolsillo "bien, ¿quieres ir a pasear un rato antes de volver a clases?", ella aceptó y me tomó del brazo dirigiéndome a la azotea, donde se podía apreciar todo el campus desde lo alto, se podían ver los estudiantes jugar y otros bailar, la brisa que desordenaba mi pelo y el sol posado en mi cabeza creaban un ambiente tranquilo, Japón sacó unos pockys, los comimos mientras conversábamos de temas variados mientras veíamos hacia abajo.....

¿Obsesión?[alechi]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora