4🍒

30.3K 1K 183
                                    

¡Vendida!

pov's maya

Me encontraba en el auto de aquel sujeto, casi pegada a la puerta pues quería estar lo más alejada de él posible, mirando el camino por la ventana me puse a pensar en cómo es que terminé aquí, en el auto de un extraño, dirigiendonos a algún lugar que seguro desconozco.
Perdida en mis pensamientos terminé pensando en mi padre, tomando en cuenta que nuestra relación no es la mejor y que apenas muestra un poco de interés o afecto hacía mí, me pregunto ¿Me buscará si no vuelvo a casa? ¿Acaso se preocupara por mi, aunque sea un poco? una pequeña parte de mi cree que tal vez lo haga, pero el resto de mi ser está completamente segura de que no es así. En cambio mi madre, ¡oh, Dios! si no vuelvo estará tan preocupada, comienzo a pensar en que tal vez no la vea nunca más y las lágrimas corren por mis mejillas.

Una vez que comencé a llorar ya no pude parar, la cantidad de pensamientos y sentimientos que tenía ahora mismo me provocaban dolor de cabeza y yo solo podía llorar, sentí que tomaron mi mano y me dispuse a voltear, al verlo pude notar que estaba preocupado, ¿Pero quien era él?

Sin darme cuenta, me encontraba en su regazo, realmente no importó, me sentía tan mal que me dispuse a abrazarlo, necesitaba un abrazo y continúe llorando hasta quedarme dormida.

[...]

Desperté de golpe, me encontraba en una habitación muy limpia y ordenada, después de analizarla detenidamente tomé la decisión de salir, pero ¡joder! esta cama es tan jodidamente cómoda
¿donde diablos me encontraba?

Al salir comencé a caminar buscando una salida, pero al caminar por el pasillo una voz proveniente de la cocina me detuvo

— Que bueno que despiertas- escuché

Me adentre a la cocina y pude verlo nuevamente

—¿Qué estoy haciendo aquí?

— Ven, siéntate , ¿Quieres comer? debes tener hambre después de haber dormido tanto.

Me senté enfrente de él, el estaba recargado en la barra analizando mis movimientos, así que volví a preguntar

—¿Porque estoy aquí?

— Bonita, contestaré todas tus dudas, pero primero debes comer ¿de acuerdo?

—esta bien.

Por lo que vi comenzó a calentar algún tipo pasta, olía muy bien. Mientras servía comida en el plato, comencé a observarlo pude prestar atención en lo apuesto que era, con cabello castaño oscuro,  unas cejas algo pobladas y una linda nariz lindas, era prácticamente perfecto, seguí observando cada una de sus facciones hasta llegar a sus ojos... Eran de un lindo tono café con pestañas un poco largas y rizadas, cualquier chica amaría sus pestañas.

—¿Ya terminaste de admirarme? - Lo escuché decir, en un tono algo burlon.

Sentí mis mejillas calientes, me habia descubierto mirandolo descaradamente, así que solo pude balbucear

—Y-yo... yo solo...

—Come pequeña, antes de que se enfríe.

—¿Tu no comerás?- pregunté intrigada

— No tengo hambre.

—¿Y yo cómo se que no le pusiste algo a mi comida?

—Puedes confiar en mí, anda, come ya.

Lo obedeci, tenia bastante hambre y sabía fenomenal. Al terminar volví a preguntarle

—¿Qué estoy haciendo aquí?

—Bueno linda, tu padre y yo llegamos a un acuerdo hace un tiempo...Vivirás conmigo apartir se ahora.

—¿Qué? ¿Por qué? ¿Cómo?

—Mira cariño, yo voy a ayudar a pagar algunas deudas que tienen, pero a cambio debes estar conmigo

—me..vendió. - susurre

¡Me vendió! ¡El maldito me vendió! Soy su hija, ¡¿Cómo pudo hacerme esto?! Me sentía tan llena de rabia, impotencia, me sentía traicionada, me ofreció como si yo fuera un maldito objeto, que le pasaba por la cabeza?

—Tengo muchas preguntas Adam...

—Debo informarte que en esta casa habrá reglas, pequeña. Una de las primeras es que debes llamarme papi.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Nov 07, 2021 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Daddy.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora