❝Asesina para navidad❞ || Satzu || G¡P

07

----Horas antes con Chaeyoung----

Miraba su reloj esperando exactamente la hora en el cual su víctima iba a aparecer.

Miró como las luces se encendían en aquel despachó y sonrió con malicia, se acercó sigilosamente a la ventana y al no escuchar nada frunció sus ojos.

Pero volvió a la normalidad al ver un humo en la habitación, abrió la ventana con rapidez y se adentro en el.

—¿Qué mierda le pasa a la persona que hizo esto?— Una voz femenina hizo presencia y frunció más su ceño, la persona al que tenia que matar era un hombre de no más de 25 años, un narcotraficante de mujeres, que carajos hacía una chica allí.

Se acercó y trató de noquear a la chica que apenas se lograba ver por el humo, pero para su sorpresa lo esquivó fácilmente devolviendo el golpe e impactando en su brazo el cual le sirvió de escudo.

—¿Qué eres?— Preguntó por lo bajo aquella chica con un elegante traje de color negro y blanco, sus ojos se encontraron, mentalmente sonrió se parece mucho a un pingüino. La mirada desafiante de ambas luchaba para saber cual de las dos era la dominante.

Aquella chica misteriosa no podía quitar sus ojos de ese pequeño ser que tenía al frente, pero una pequeña luz que logró divisar le quitó toda la concentración. Pensando rápido, agarró a la chica con orejas de animalito por la cintura y tiró una bomba de humo a sus pies.

Chaeyoung no reaccionó lo suficientemente veloz para esquivar la acción de la chica, dejándose llevar por aquella castaña bien vestida cayendo al piso por la fuerza de la desconocida.

—¿Qué car- — Fue interrumpida — Shhhh... — La intrusa colocó su mano en la boca de Chaeyoung.

— A no, a mi no me chiteas— Chaeyoung trata de quitar la mano de la castaña no logrando su objetivo.

— Shhh, mira — Aún con la mano de la desconocida en su boca volteó a donde estaba señalando la castaña.

Una extraña luz roja estaba buscando un objetivo, abrió los ojos como plato al notar que estaba pasando, todo era una trampa. Frunció su ceño, tal vez y solo tal vez aquella chica podría ser... no, imposible.

— Bueno gatito, ¿Qué haces en estos lugares peligrosos? —   La castaña se alejó un poco de ella, agarró un lapicero que estaba en el piso y lo tiró escuchando un disparo en la dirección en la que provenía aquel lapicero el cual había explotado por la bala.

Sonrió al ver a la otra chica expectante, pasó su mano por su cintura y agarró una pistola, se incorporó y disparó desde donde venia la bala.

Se escuchó a lo lejos un quejido y el como un cuerpo cayó desde un edificio. La Chaeyoung se quedó pasmada por un momento, recobrando su postura a los pocos segundo de lo que pasó.

La castaña volteó con una media sonrisa, pensando que el peligro había pasado. Con una gran habilidad esquivó un cuchillo que se dirigía a su rostro, cuando se dio cuenta la más baja estaba con un cuchillo en su garganta.

— No me llames gatito — Chaeyoung estaba a la defensiva. La puerta se abrió de un solo golpe dejando ver a un chico de aproximadamente 25 años acompañado de dos chicas a cada lado.

Ambas voltearon de inmediato, la chica con el cabello castaño gruñó al ver su objetivo tratar de escapar. 

— Perfecto...— Murmuró Chaeyoung sarcásticamente regresando su atención a la castaña con sospechoso traje.