I Don't Need To Heart Your Voice [Hakkai Shiba X Oc]

14. El dictado del corazon.

Capítulo catorce.

《|El dictado del corazón|》

Kori.

Me quedé observando al recién llegado a la espera de que hablara pero  no lo hacía, me ponía nerviosa su mirada, era tan serio que llegaba a dar un poco de escalofríos el no saber lo que pensaba.

— ¿Podría hablar contigo un momento?— Pregunto con calma, estaba por responder pero Yuzuha se me adelantó.

— Es mejor que no, ven Kori vamos a...

—No te preocupes.— Le avise para después mirar al rubio.— Claro, ¿Necesita algo?

— Ven.— Me hizo una seña para que lo siguiera lo cual hice en completo silencio, nos alejamos lo suficiente para que las chicas no pudieran escucharnos.

Ahora que lo pensaba, mis tropiezos con este chico misterioso no habían sido agradables o comunes, en las tres ocaciones que lo vi estuve a punto de morir o fui golpeada.

— Quería disculparme contigo.— Aviso después de un rato.— Creo que empezamos con el pie izquierdo.

— Si, supongo que no es común ver a alguien en situaciones tan poco frecuentes.

— No era mi intención atropellarte, toque el claxon pero parecías no escucharme y bueno yo...

— No hace falta disculparte.— Le sonreí para que se calmara ya que estaba tartamudeando mucho.— Fui muy distraída y descuidada, en parte tengo la culpa.

Me sonrió de manera cálida, tenía una sonrisa muy bonita, al igual que sus ojos.

— Aprovecho para presentarme, Soy Seishu Inui.— Me extendió su mano y la tome.

— Korina Kamaru, todos me dicen Kori.

— Es un placer Kori, espero podamos ser amigos.— Aquella última oración me había hecho sentir inmensamente feliz.

— ¡Cuenta con eso!— Cubri mi boca al notar que había levantado la voz de más.— Lo siento yo no...

— ¿Interrumpo algo?— Escuche la voz de Hakkai repentinamente lo cual me sobresaltó.

— ¿Terminaron ya la reunión?— Pregunte a lo que el asintió.— Bien, un gusto conocerte Inui-Kun. Nos vemos luego Hakkai.

Les sonreí a ambos y agite mi mano despidiendome también de Emma y Yuzuha para comenzar a buscar a mis hermanos.

Mientras caminaba solo pensaba en porque Hakkai no me pedia que habláramos, es decir, pasaron muchas cosas en los últimos días y cuando estamos en una situación medianamente buena solo interrumpe una conversación.

Conocía a Hakkai hacia años, fue mi primer amigo, se esforzó mucho para aprender el lenguaje de señas, nunca le molestó hablar por cartas o que de vez en cuando corrigiera su ortografía.

Quizás sea la persona que más me conoce, pero a estas alturas siento como si fuéramos desconocidos. Nunca me di cuenta del maltrato de Taiju hacia el y Yuzuha, ahora que lo pienso, nunca conocí a sus padres y a Taiju solo lo vi aquella vez que quise despedirme y con el incidente.

¿Como podría gustarme una persona de la cual aún desconozco tanto?

— Aveces me pregunto si de verdad te conozco.— Murmure con desilusión.

— ¿Conocer a quién?— Por la compañía repentina lance un golpe al aire para darme cuenta de que era Mitsuya-Kun.

— Lo lamento mucho.— Me disculpe viéndolo con preocupación.

— Recuérdame no volver a llegarte de sorpresa... Kazuma te está esperando en el estacionamiento.

— Gracias, nos vemos otro día Mitsuya-Kun, lamento lo del golpe.

— No te preocupes, pero, ¿A que te referías con conocer a quién?— Le di la espalda para no ponerme nerviosa al contestar.

— Solo son mis delirios, no te preocupes. Adiós.— Camine con rapidez antes de que pudiera preguntarme otra cosa.

Hakkai.

Observe a Kori alejarse regañandome a mi mismo por no buscar manera de hablar con ella sobre lo que pasó.

— ¿Cual es tu problema?— La voz de Inui me sacó de la vagancia de mi mente.

— ¿El mío, cual es el tuyo?— Me miró extrañado.— ¿Para que te acercas a Kori?

— Ese no es tu problema, además, ahora estamos en el mismo bando y yo solo le rindo cuentas a Hanagaki Takemicchi.— Respondio con simpleza, me dio la espalda para alejarse pero se detuvo a medio camino.— Además, no recuerdo que exista alguna regla donde diga que solo tu puedes convivir con Korina.

¿Convivir? ¿Por qué estaría interesado en ella? Con esa duda rondando en mi cabeza y molestia me acerque a Yuzuha la cual se estaba ya despidiendo de Emma-chan.

— ¿Eres idiota o que?— Pregunto con reproche.— No has hablado con Kori desde que discutieron, no la veías desde lo que pasó en la iglesia y cuando tienen la oportunidad de aclarar las cosas no lo hacen.

— No hay nada que aclarar.— Respondi sin mirarla.— Ella y yo estamos bien.— Quería convencerme de eso pero ni siquiera estaba seguro de cómo estábamos.

— Es tan obvio todo. Te gusta Kori, tu le gustas a ella, ¿Que esperan?

— ¿Gustarle yo a Kori?— Repeti sus palabras y negue con la cabeza.— Ella solo me ve como su amigo, nunca me ha demostrado lo contrario.

— ¡Lo dijo en la iglesia!— Exclamo deteniendome.— Dijo que eras el chico al que quería, ¿Que más prueba que esa?

— Es un sentimiento normal entre las personas, yo también la quiero, así como te quiero a ti, Taka-chan, Kazu y...

— No la quieres como a nosotros.— Se cruzó de brazos mirándome con insistencia.— Tu no la quieres como una amiga, sino como la chica que te gusta.

Querer a Kori como la chica que me gusta, no era tan sencillo, por más que Yuzuha dijera que ella gustaba de mi no era algo seguro, sin importar que tan fuertes fueran esos sentimientos  hacia ella me importaba más estar a su lado sin importar como fuera.

No quería perderla, y confundir el cariño que me tenía con un enamoramiento podría ser un error que nos costara nuestra amistad.

— Habla con Kori, le dijiste cosas hirientes y por eso la manipularon con facilidad e intento hacer estupideces.

—¿Que se supone que le diga?

— La verdad. Es importante escuchar a tu cabeza pero no dejes de prestarle atención al corazón.