Fuck The Vegas

Capitulo 5

SOPHIA

Cada vez que tengamos que besarnos voy a terminar asi? Como si fuese un trapo, maldita sea! Necesito estar unos minutos sola, para volver a poner los pies sobre la tierra, y dejar que mi cuerpo termine con los temblores post beso de William.

Igualmente me confunde, me confunde demasiado, como es posible? Eh? Como es posible que alguien tan idiota, tan borde, de un momento para el otro se convierta en el hombre más dulce habido y por haber? En uno que te acompaña, aconseja y protege?

Son tantas las cosas que en este momento tengo en la cabeza, que temo confundirme, por eso en todo el viaje y agradezco que William haya respetado mi silencio. Desde que subimos al auto, que no hablamos, desde antes del beso para ser más precisos. Me hizo olvidar inclusive hasta de que estuve a punto de ceder ante las incoherencias e idioteces que me dijo David!

Porque si, estuve a punto de ceder, fue una relación de años, donde no todo fue malo.  Hoy, después de mucho tiempo, David volvió a prestarme atención, a querer comprarme con palabras baratas, y yo estoy tan confundida y soy tan idiota, que estuve a punto de ceder, por eso tengo que agradecerle a William el haber intercedido cuando me vio flaquear.

Cuando llegamos al Upper East Side, miro embobada todos los edificios y casonas, siempre me gustó este lugar y ya mentalmente  comienzo a sacar las cuentas de los horarios en los que deberé salir mañana en la mañana para llegar a tiempo al trabajo. Pero no muy convencida, saco mi Iphone y miro la distancia que hay desde aquí hasta Woodside, que es donde trabajaré… Bien! Cuarenta minutos.

-          Entonces si entro a las siete y cincuenta de la mañana, debo de salir de aquí a las seis y media, por las dudas – hablo en voz baja, es una costumbre que tuve desde chica.

-          Vas a seguir hablando por lo bajo como los locos? Dime que es seguro que te meta a mi casa – me dice William sonriéndome mientras maneja

-          No me di cuenta – soy una idiota, debo estar de todos colores – bueno no me escuches.

-          Ey tranquila, creo que es tierno – lo miro sorprendida – esa vocecita hablando en voz baja, murmurando… cuéntame

-          Que quieres que te cuente? – este tipo se volvió loco?

-          Cuéntame que estabas cuchicheando con tu amigo imaginario – no aguanto la risa y comienzo a reírme.

-          Eres un idiota, estaba sacando las cuentas para salir mañana hacia el trabajo. No tengo auto, asi que tengo que saber cómo viajar.

-          En serio? – me mira anonadado

-          Sí, tengo cuarenta minutos de viaje hasta allí, o sea que, debería salir a las seis y media para entrar a las siete y cincuenta.

-          Pero para que vas a salir tan temprano?  - lo miro como si fuese un imbécil

-          Me preguntas en serio?

-          Si

-          Y porque pueden haber problemas con los transportes William – le hablo como si fuese obvio – porque esas cosas pasan, hay demoras casi siempre.

-          Oh… - no lo puedo creer

-          Nunca has viajado en algún transporte público?

-          Claro que sí! – se ofende y mira hacia el frente

-          Dime en cual