Prólogo

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Notas Importantes

↳ Advertencia: La presente historia es un AU (Alternative Universe) que puede incluir contenido sexual explícito, situaciones de violencia y lenguaje adulto/vulgar no apto para personas sensibles. Si te resulta ofensivo este tipo de material o eres menor de 16 años, se sugiere discreción.

↳ Para fines que competen a la historia misma y debido al complejo manejo de algunos de los personajes, es posible que en algún momento se encuentren con un poco de OoC.

↳ Queda estrictamente prohibida cualquier copia y/o adaptación de esta obra de ficción. Todos los derechos reservados.

↳ Disclaimer: Los personajes no son míos, pertenecen a Masashi Kishimoto.

↳ Disclaimer: Los personajes no son míos, pertenecen a Masashi Kishimoto

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SINE DIE

Las puertas del Cielo y el Infierno
son adyacentes e idénticas.

Nikos Kazantzakis

Nikos Kazantzakis

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Prólogo

La joven dio un pequeño sorbo al chocolate caliente que sostenía entre las manos y dejó que su mirada vagara por las desoladas y grises calles que podían apreciarse desde la ventana a su costado. Afuera, una ligera llovizna forzaba a los pocos transeúntes a acelerar el paso con el fin de resguardarse de las pesadas y filosas gotas.

Trotando y esquivando charcos de agua como si ésta fuese lava ardiente, los cuerpos se movían de un lado a otro como bailarines de un drama. Sin embargo, ninguno de ellos había entrado al pequeño café donde aguardaba pese a encontrarse escasamente ocupado.

Tampoco los culpaba, pensó dándole otro pequeño sorbo al chocolate. El menú que el local tenía para ofrecer era, por decirlo de alguna manera educada, escaso, y el sabor de la única bebida que había consumido, tristemente deplorable.

—Señorita, ¿le gustaría que le trajera algo más?

Con renuencia, la chica apartó la mirada de la ventana y la enfocó en su interlocutor. Se sentía cansada y la amable sonrisa del camarero que la había estado atendiendo desde su llegada, más que confortarla, la estaba comenzando a irritar. No era su culpa, por supuesto. La cadena de eventos desafortunados que la habían llevado hasta ese punto en el mapa de una ciudad poco conocida era simple y llanamente culpa suya.

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