『3」¿un beso de cuento de hadas?

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el rostro del rubio se enrojeció de la rabia,podía sentir como la sangre subía a su cabeza decorando esta con un amenazante rojo carmín,cosa que el pelinegro se percató al instante dándose cuenta que sus palabras fueron totalmente erróneas.

—estoy cansado de comentarios como esos,siempre en todos lados,sobre todo en esta maldita escuela,te apuntan por ser gay,nunca he visto a ningún hetero a punto de ser abusado o con este tipo de comentarios por su orientación—cristalinas lágrimas empezaron a producirse en los finos y delicados ojos de chifuyu,trago amargamente saliva y salió casi disparado del aula para que el pelinegro no se percatase que había sido la causa de sus lágrimas

—mierda—pensó el pelinegro,no era un sabio y siempre elegía las peores palabras en los peores momentos,pero ahora sobre todo sentía una gran punzada de dolor en su corazón,busco al rubio en todo el establecimiento pero no logro encontrarlo

así pasaron 2 días,en miradas perdidas,suspiros de desilusión y pucheros de arrepentimientos,baji observaba con el rabillo de sus marrones ojos a su compañero de asiento,encontraba que era sumamente atractivo y haría lo que fuese para que esté al menos le dedicase una sonrisa,el rubio moria de ansias de hablarle,pero su estómago se retorcía de la vergüenza por lo de hace unos días,el sabía que no era para tanto pero simplemente explotó después de todo lo sucedido

—buenos días alumnos—saludo el profesor de química que era satanas personificado para sus alumnos—¿como están?,de igual manera no es de mi interés—el señor era de aproximadamente unos 50 años y cada 5 segundos acariciaba los mechones blancos que adornaban su cabello—usted no es rapunzel su cabello mágicamente no va a volverse del color original por mas que lo acaricie—susurro baji sacándole una carcajada a chifuyu que en la mente del pelinegro resonó como un canto angelical

—a ver de qué tanto se ríen atrás,cuéntelo así nos reímos todos—demandó el profesor con una penetrante mirada que hizo que chifuyu borrara completamente cualquier rastro de risa—responda señor matsuno

—ehh yo...—chifuyu no sabía que responder su mente carecía de palabras en este tipo de situaciones,el era el tipo de alumno que era invisible para la
clase tantas miradas hacían que hasta partes que él no creía que podían sudar sudarán

—yo me reí de su blanca cabellera señor—levantó la mano el pelinegro con una voz desafiante,toda la clase quedó paralizada por un momento,se podría jurar que los ojos del señor de una edad avanzada se teñían de rojo al igual que su rostro

—usted y el señor matsuno se quedarán 2 horas en castigo hoy en la tarde y tendrán que limpiar todo el aula—soltó en un grito enfurecido,los alumnos de adelante podrían jurar que unas gotas de saliva salpicaron,el rubio automáticamente sintió como su abdomen se contraía de los nervios y el pelinegro esbozó una pequeña sonrisa detrás de la pila de libros,más que castigo lo sentía como una pequeña victoria

pasaron las horas y los alumnos se retiraron,en los pocos días que el pelinegro había llegado a la escuela se había hecho muy popular por seductora personalidad dominante y su apuesto semblante carismático que siempre estaba dispuesto a mostrar una colmilluda sonrisa que hacía saltar a diversos corazones,pero a él solo le interesaba asaltar a un corazón.

—h-hola baji-san—saludó el rubio con una mirada tímida sacando del mar de pensamientos al pelinegro

—hola chifuyu,¿listo para hacer de cenicienta?—exclamó baji tocando tímidamente su suave cabellera,esta era adictiva,era como tocar un suave cachorrillo emocionado

—si que te gustan los chistes de princesas—menciono chifuyu un poco más seguro de sí mismo sorprendiendo al pelinegro que a la vez se sentía victorioso al darse cuenta que su rubio ya no estaba tan enojado con el

—como no si tengo a semejante príncipe en frente mío—mencionó levantando una ceja y mirándolo con una cautivadora mirada seductora que penetro en los verdes ojos de matsuno desestabilizando hasta el más fuerte de sus pilares,el rubio sólo se sonrojó y baji sonrió sintiéndose triunfador

el pelinegro tomó clorox y empezó a limpiar las ventanas,si la limpieza no era lo suyo solo limpiaba los desechos del gato que alimentaba,lo demás era otra galaxia para el,chifuyu río y fue detrás de él a ayudarle—al menos este príncipe sabe más de limpieza que el bufón—dijo quitándole el paño de la mano a baji y subiéndose sobre una mesa para poder limpiar cada extremo del vidrio con un artículo que estaba diseñado para ello,baji solo observaba cada detalle del rubio,podría jurar que tenía una granja de moscas habitando su boca de tanto tenerla abierta

de la nada el rubio da un mal paso y pierde el equilibrio,haciendo que la mesa se tambaleara hacia un lado y este se deslizara velozmente,cerró sus ojos preparándose para el fuerte impacto que daría contra el frío piso,pero de la nada sintió unos fuertes brazos sosteniéndolo,cuando abrió sus finos párpados se encontró con los preocupados ojos marrones de
baji,también podía ver sus jugosos labios entreabiertos,el rubio sentía que casi era una invitación para abalanzarse sobre este y darle una buena saboreada a los labios que desde el primer día que vio lo tentaron,pero se contuvo y con la poca cordura que mantenía se apoyó del hombro del pelinegro para que sus pies pudiesen tocar el piso

—al menos este bufón tiene los brazos más fuertes que los de un príncipe—río para romper el hielo baji,pero solo logro que el rubor del rubio se expandiera hasta llegar a sus lechosas orejas,ocultó su cara en sus manos y se volteó para poder seguir contribuyendo al orden de la sala pero en otros sitios

fue ordenando hasta que se encontró con una mochila abierta y todos sus libros regados por el piso,se agachó para recogerlos pero en una de estas vio algo que se robo la atención de sus finos ojos,la bandera bisexual

—¿tan hetero me veo?—cuestiono sarcásticamente baji llegando por su espalda y tocando confianzudamente su hombro,haciendo que chifuyu tuviese un escalofrío que atravesó su alma

—b-baji san,¿esta mochila es suya?—preguntó el rubio cambiando desesperadamente de tema,baji se acercaba cada vez más acortando la distancia entre ambos cuerpos,ya en un punto ambos podían escuchar la respiración del otro,sobre todo la del rubio que era la que más se hacía notar de lo acelerada que estaba

—si...¿por que?,¿quieres que te demuestre el por qué de esa bandera bi?—tomó su mentón con un solo dedo y clavó su desafiante mirada en los delgados labios de chifuyu,este último solo atinó a cerrar sus bellos ojos y...

tentadoramente prohibido,baji x chifuyu,bajifuyuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora