Capitulo 4

7 1 0
                                    


Tome mi Magnun 357 y la deslice sobre mi cara, los demas estaban preocupados por los que les habia dicho, ciertamente eso era un problema, estabamos en una casa con extraños, personas que no conociamos, y solo podiamos pensar en que estas personas podian ser los mismos asesinos que andaban en el edificio de john, iba a hacer lo que fuera para protegerlos, y ellos harian lo mismo.

- Permaneceremos despiertos, luego tomaremos una ronda para descansar, mientras los otros vigilan, Mark dijo que estas personas aparecian al rededor de las 3 de la mañana, asi que capaz nos estuvo mintiendo, el sabe perfectamente lo que dice, por eso hay que tenerle mucho mas miedo - le comente al grupo mientras vigilaba la puerta de madera con un cerrojo viejo que nos separaba de ellos y de nuestra privacidad

- Sigo pensando que eres un dramatico, ¿acaso no pudo ser una coincidencia?, no estoy de acuerdo con desconfiar de estas personas, nos dieron un techo y comida, no me parece justo agradecerles con desconfianza - me dijo mary estando cerca de mi

- ¡Abre los ojos maldita sea! - Le grite desesperadamente, gruñendo, mientras ella me mataba con su mirada de ''Yo tengo la razon, no tu idiota''

- Hey .. hey calma.. - Me dijo john apartandome de ella

- Como puedes decir que tenemos que darles confianza a estas personas solo porque nos dieron comida y alojamiento, en este mundo no debemos confiar en nadie, y mucho menos ahora, así que lo que menos puedes hacer es dejar de.. - mis palabras fueron interrumpidas por dos golpes a la puerta - ¿Esta todo bien? - era la voz de mark Todo esta bien mark, disculpa los gritos, no volverá a suceder, los dejaremos descansar, ya sabes como nos ponemos los hombres cuando discutimos que equipo de futbol es mejor - le dije sonriendo y me debolvio una sonrisa áspera y abandono la habitación


Todos se me quedaron mirando y solo me dirigí a la pared y me recosté sobre ella, les dije a las chicas que descansaran, y los demas y yo nos quedamos vigilando, vimos la hora y eran las 4 de la mañana, y luego las 5... y cuando el sol empezo a salir, nos quedamos dormidos

(..)

- ¡Venga!, ¡Despierta! - Escuche una voz que me gritaba, mientras abria los ojos visualice a duras penas la cara de Eliannys, quien se notaba desesperada, decidí cerrar los ojos y volver a abrirlos levantandome

- ¿Que sucede - le pregunte bostezando, decidí llevar mis manos a mis ojos para intentar ver con claridad cuando en cuestión de segundos la mano de eliannys aterriza en mi cara, ¡Me ha dado una cachetada!. - ¡¿Que demonios fue eso?!

- ¡Despierta! Necesitamos tu ayuda abajo, Mark ha desaparecido y Amy dice que hay una nota en su cuarto, tienes que venir a ver esto - me respondió ella un tanto malhumorada, me pregunto si hará eso todas las mañanas, con esas manos pesadas prefiero morir de insomnio, tome el revolver y baje rápidamente junto a ella

Todos estaban en el cuarto de mark wallace, y visualice a Amy con una nota en su mano, le hice una seña para que me la mostrara, y me la dio, la letra era un poco ilegible, pero pude entender claramente lo que decia

'' Me fui para no volver, cuidate de los espejos''

¿Espejos? ... A que se refiere con eso...

- Amy dice que esa no es la letra de su padre, y que en cinco años, mark nunca habia salido de este hogar sin ella - me dijo luis carlos tras mirar mi cara de confusión

- Entonces, no.. esto, no tiene sentido, ¿por que se iría?, ademas estuvimos despiertos hasta tarde no lo escuchamos salir - le comente a los demás, escuche un grito afuera era la voz de jan carlos

Corrimos a la puerta principal, y vimos a alguien en el coche patriotico de mark, tenia una mascara negra con forma payaso y un uniforme de señor de limpieza, parecia un conserje con una intimidante mascara puesta, bajo rápidamente del coche y le pego con tanta fuerza que la alarma se activo, tome mi arma y le apunte, pero corrió tan rápido hacia el bosque que lo perdí, la alarma seguía sonando, y no era de esas inservibles, esta parecía que pudiésemos estar en un estadio con 30 mil personas gritando, y la escucharía aunque no quisiese,

- Iré a revisar con luis - dijo jan corriendo hacia el bosque con la escopeta y el bate que habíamos encontrado antes

- Vendrán, esos muertos de hambres, escucharan el ruido y vendran a comernos, mejor nos alistamos con recursos y todo lo que podamos, por si las cosas se ponen feas - añadió eliannys mirando por ultima vez hacia el bosque, para dirigirse a la entrada de la casa

- Jorge, yo no me iré sin mi padre - dijo amy bajando la cabeza

- Lo encontraremos, no te preocupes ¿si? - le dije tendiéndole mis brazos, y ella acepto abrazarme, mary me miro con mala cara y entro a ayudar a eliannys

- Ya fue suficiente chiquillos, los idos vendrán en cualquier momento voy a vigilar - agrego john, también yéndose del lugar

Y fue exactamente lo que paso, escuchamos unos ruidos, unas especies de gemidos, pero mucho mas intimidantes que venían hacia nosotros, no eran solo cinco, ni diez, ¡era todo una puta horda de esos bichos!

Tomamos las cosas y nos dirigimos hacia el coche de mark, amy insistía en quedarse, pero no la íbamos a dejar

- ¡Vamos! no es tiempo de juegos, ¡sube al coche! - le grito mary

- Lo vamos a encontrar, pero no podemos quedarnos, no hay suficiente munición para todos ellos, asi que por favor sube al coche ahora o tendré que hacerlo a la fuerza, porque no dejare que te maten - tome a amy por el brazo y acepto subir, jan estaba ganando un poco de tiempo matando a unos de ellos, cuando estabamos todos ya en el auto, nos dimos cuenta de que definitivamente había sido un error quedarnos, el sitio estaba invadido por estas cosas, aceleramos a toda marcha y nos adentramos en el bosque, el hombre con la mascara de payaso se escapo, y por el estábamos huyendo ahora.

- Esto es un error, no deben mantenerse cerca de mi - Dijo amy en pleno silencio, sentí como si el corazón se me fuese a salir - Ellos vendrán por mi

- ¿Los idos? - pregunte

- Ojala, esto es mucho peor -

Fin del capitulo 4

Lluvia RojaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora