"La pequeña abertura de mi corazón parecía no cerrarse, pero parece que el tiempo te puso en mi camino"
- Hoshikawa- san , estás haciendo esto mal - Rengoku se acercó a ella , le había dado un vistazo rápido a la agenda de las clases que la azabache daría esta semana , Himawari se sobresaltó ante su llamado , ni siquiera se había dado cuenta de que estaba detrás, su dedo señalaba parte de la agenda que estaba realizando - Si metes un tema el día lunes no debes repetirlo el jueves a menos que quieras hacerles una prueba o se confundirán - sus palabras eran serias pero amables - ¿Quieres que te guíe? – pregunto , sus ojos naranjas no se despegaron de aquella sonrisa bastante singular que llamaba la atención tanto como su cabello.
Se dio una cachetada mental al estar atenta en otra cosas.
-No, está bien – contesto, volviendo en si - ¡Muchas gracias por el consejo! - sus labios formaron una sonrisa pequeña, el rubio se quedó en silencio y dio unos pasos hacia atrás.
- ¡Bueno! - cruzo sus brazos, - Cuando termines me envías lo que has hecho, necesito revisarlo-
Dicho esto él se alejó hasta llegar donde Tengen saliendo en el proceso.
Así era la rutina que se había formado entre los dos con el paso de las semanas, el revisaba algunas cosas que ella hacía y luego le daba consejos o la felicitaba.
Y aquella rutina se había vuelta bastante agradable.
Bastante, para ser exacta.
Cuando se escucho el timbre de receso, Rengoku pudo ver a lo lejos aquella compañera tan singular, vio como recogía sus cosas rápidamente y salía del aula, en estas semanas se preguntaba.
¿Por qué ella no comía con los otros?
Y ni hablar cuando quería buscarla para infórmale de algo, nunca parecía encontrarla por ningún lado y solo le tocaba esperar hasta que el receso terminara para informarle, un suspiro se escapó de sus labios.
No debería ni siquiera pensar en esas cosas.
Tengen quien escucho aquel suspiro cansino lo miro alzando una de sus cejas.
- ¿Que te pasa? – le pregunto - ¿Eso de nuevo? – le dijo refiriéndose al problema de inicios del año, Kyojuro negó – Ya hombre...estas últimamente raro – Tengen hizo una mueca - ¡Me estas dando miedo! – bromeo
- ¡No es nada! – forma una sonrisa con sus labios – Estaba pensando en que comer cuando llegue a casa... - el peliblanco puso sus ojos en blanco
-Uhm... ¿Y si salimos hoy? –
-No puedo tengo un compromiso con mi hermano menor – Rengoku había mentido, en otra ocasión tal vez le diría que sí, pero el día de hoy parecía no ser el más agradable de todos.
¿La razón? ...las llamadas y aquellos mensajes de voz que él no quería escuchar, no sabían porque últimamente ese número lo estaba llamando con tanta insistencia y eso lo hacía sentirse peor.
¿Qué demonios quería esa persona con él?
Nada bueno, eso lo tenía en claro.
El rubio empezó a buscar su bento en su maleta, escuchaba también como Tengen le contaba sobre una chica que había conocido el día de ayer, según sus palabras "Un ángel de rostro hermoso y cuerpo espectacular" que además tenía una amiga y que quería presentársela ; tenía tanta hambre que ni siquiera se dignó en contestarle el "No gracias" de siempre , solo quería comer y tal vez la comida le alegraría el día , cuando sus manos tomaron aquellas 2 cajas de bento Shinazugawa apareció de la nada, con su semblante serio se puso en medios de los dos, traía unos papeles en su regazo y otros en la mano.
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¡Oh , my love! (Kyojuro x oc)
Romance! El amor puede ser algo problemático! Las cartas misteriosas enviadas por un anónimo han estado poniendo la vida del profesor de historia de cabeza, además de la nueva y extraña profesora de literatura quien ha despertado algo en él. Con un corazón...