une

76 5 0
                                    

Cómo si no tuviese suficientes problemas con su tarea, ahora su padre quería llevarlo a un reformatorio gracias a una discusión que habían tenido ambos.

"Es mi casa y debes respetar mi autoridad"  — el señor Min grito, YoonGi creía que toda la cuadra iba a escucharlos — "¿Crees que me siento bien sabiendo todo lo que haces?" — El Min más pequeño bajó la mirada, intentando no llorar, el había ido a comprar flores, pero su padre enseguida reaccionó, diciendo que está era una actividad para mujeres — "¡Responde cuándo tú hablo! — Otra bofetada, YoonGi solo subió a su cuarto, oyendo los gritos desesperado de su padre, él jamás había desobedecido de tal manera, decidió ponerse sus auriculares e ignorar el asunto, pero cómo por arte de magia, al tocar la cama, se durmió.

Abrió los ojos cuándo el señor Min entró con la cabeza gacha, él ya lo sabía de memoria, ahora vendría a pedir perdón — YoonGi, Hijo... — dijo el hombre en un tono bajo, la culpa lo mataba, ¿Qué? Él era creyente, pero no un abusador — lamento lo de ahí abajo, pero sabes que los hombres no buscan flores, los hombres las destruyen — bromeó, golpeando suavemente la pierna de su hijo, YoonGi fingió una risa y tan solo Asintió.

— te perdonó papá, me comporte mal, lo sé... — lo dijo en un tono bajo, no había hecho nada malo, pero quería que su padre se fuera de su habitación o iba a explotar por tanta tensión — ¿Qué hora es? — su padre miró el reloj que tenía en su muñeca y respondió "10 A.M." Entonces YoonGi se asustó, tenía que llegar a la iglesia a las 11.

Se levantó de la cama y corrió hasta su armario y comenzó a buscar su uniforme, comenzó a desvestirse ahí mismo, olvidando la presencia de su padre. Pero se incómodo cuando sintió unos ojos en su cuerpo, la respiración de ese hombre cada vez más cerca de su cuello y él muy nervioso.

En cuanto las manos de su padre intentaron tocar su cintura y Susurró un "Shh" sobre su oído, golpeó la entrepierna del mayor con su pie y corrió hacia la puerta principal. Corría hacia la iglesia, llorando, no era la primera vez que su padre hacía eso... Todos los recuerdos eran claros.

Llegó a su destino, y como siempre, ahí estaba una monja.
¿Por qué? Pues, la iglesia tenía un orfanato, y ellas se encargaban de cuidar a todos los pobres niños que estaban ahí, no eran malas, pero tampoco buenas, era cosa de que todos acatarán sus órdenes a la perfección. Mordió su labio y entró, buscando al padre.

...

Estaba acomodando sus cosas en una nueva habitación que compartía con dos chicos más, luego de contar lo sucedido, el padre hizo que YoonGi rezará y pidiera misericordia por su padre, luego fue enviado al orfanato como si no tuviese hogar, y solo tenía esas prendas.

Terminó de acomodarse y en eso sintió como alguien iba hacia la habitación, metieron a un adolescente casi a la fuerza — ¡Entra, demonio y que el señor se apiade de tí! — gritó una monja, cerrando la puerta algo molesta, YoonGi solo vió con curiosidad al chico, solo podía decir que sus ojos eran café y que tenía unos grandes labios, YoonGi creyó que sus labios parecían nada al lado de los de ese jóven.

De la nada reaccionó al oír la voz del contrario — un nuevo, vaya vaya. Hace mucho no entraba nadie a esta habitación — sonrió el chico, acercándose a YoonGi, el cual retrocedió un poco — no tengas miedo, chico, es un gusto. Soy SeokJin ¿Y tú?

----

Prometo que los capítulos serán más largos, este fue escrito a las 3 A.M. y bueno, tenía sueño e hice lo que pude, luego será corregido.

Mmh~

¡Min YoonGi! • KookGiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora