Érase una vez... apoyo incondicional.
Kim Minjeong se miraba al espejo pensando cuantas veces tendría que repetir el paso de baile para que le saliera bien. La morena llevaba horas en la sala de ensayo sin parar, esperando que por fin le saliera alguno de los pasos que le había enseñado el coreógrafo. Notaba como las gotas de sudor bajaban por su frente.
De pronto la puerta de la sala se abrió dejando ver a una Karina apresurada. La luz de aquella habitación era tenue, Minjeong no quería que nadie la viera ensayar tanto pues la joven ya debería saber los pasos de sobra, no podría permitirse que pensaran que sus dotes eran inferiores. No contó con la visita de su amiga.
—¿Minjeong?
Minjeong frenó en seco y tragó saliva, intentó no pronunciar palabra como si eso fuera a hacerla desaparecer.
—¿Qué pasa? —preguntó como si nada.
—¿Qué haces aquí tan tarde? ¿Y por qué estan las luces tan apagadas? —frunció el ceño.
—¿Y tú que haces aquí?
—Pregunté yo primero —sonrió.
—No, de hecho lo hice yo antes. Te pregunté que qué pasaba —ella rodó los ojos.
—Me he dejado esto —alzó la chaqueta que estaba sobre el banco—, ¿y tú?
—Yo... Quería ensayar más.
—¿Más? Si llevamos todo el día Mindongie, tienes que descansar.
—Pero... Es que... —suspiró derrotada sentándose sobre el banco. A quién iba a engañar— No entiendo los pasos. Quiero decir, sí los entiendo pero no me salen. Lo hago una y otra vez pero nunca quedarán igual de buenos que los vuestros.
Minjeong agachó su cabeza mirando al suelo tras la confesión. Karina negó y fue hasta ella, se sentó a su lado.
—Hey, no digas eso. Te van salir igual que a nosotras o incluso mejor, ¿me oyes? —Minjeong rodó los ojos— ¡Hey! ¡No hagas eso! Va en serio. Eres buena.
—Tan buena no seré si no soy capaz de aprender un simple baile.
—Eso es porque no lo aprendiste con la persona correcta. Lo siento Jon —era el coreógrafo—, no lo haces bien.
Minjeong rió negando y Karina se incorporó ofreciéndole su mano a Minjeong.
—¿Ahora?
—Lo dices como si no estuvieras practicando hace 5 minutos. Vamos, esto lo hacemos juntas.
—Bueno, está bien.
Minjeong le dio al play a la musica y Karina le dijo que intentara seguirla a ella. La joven alucinaba con los movimientos de Karina, se notaba que había nacido para esto, que el baile era lo suyo. Seguir a Karina era mucho más fácil y cómodo que hacerlo con Jon o con todo el estudio delante, sin duda.
—Mira, este paso hazlo asi —Karina inclinó su cuerpo hacia delante apoyandose en su rodilla—, lo haces rápido como si simplemente estuvieras inclinándote.
—¿Así? —la imitó, ella sonrió.
—Inclínate un poco más, sin miedo.
—Pero es que... —Minjeong volvió a intentarlo y comenzaba a desesperarse—. Soy horrible de verdad, no me soporto.
—¡Mindongie! —Karina la agarró del rostro para que la mirara— te he dicho que no vuelvas a decir eso. Te esta saliendo bien, es cuestión de practicar.
—No digas eso para contentarme, tú y yo sabemos que no.
—Minjeong... Sabes que no te mentiría —su mirada se clavó en los ojos de la joven.
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Érase una vez | winrina
FanfictionÉrase una vez... Winter y Karina de Aespa. Cinco relatos de una misma historia. Historial original.