"𝓛𝓸𝓿𝓮" is just a lie meant to make you 𝒷𝓁𝓊ℯ

Memories of a stolen place

Cuando abrió los ojos, solo veía arboles altos, que no parecían tener un fin. Entre las ramas se filtraba una luz blanca.

Pensaba que estaban en el estudio, grabando algo, pero no recordaba que estuvieran haciendo eso antes de dormirse. Entonces recordó que estaba acostado en la cama del maknae.

Escuchándolo cantar hasta que se quedo dormido, o bueno, es lo que suponía. Despertando ahí.

Se levanto de a poco, sintiendo la brisa fresca chocar contra su piel. Dándose cuenta que no traía ropa, pero no se sentía incomodo, o apenado. Se sentía... libre.

Ahora estaba completamente convencido que no estaban grabando algo, pero, ¿en dónde estaba?

De nuevo la voz que cantaba sonó y eso hizo que se moviera, que empezara a caminar, tomándose de los troncos de los arboles. Se sentía un poco mareado.

De repente, la canción se detuvo, y la brisa trajo un golpe de aire con aroma a jengibre, lo que hizo que se mareara más, cayendo de rodillas.

Entonces, a su alrededor se comenzó a escuchar loa crujidos de las ramas y las hojas secas. Alguien se aproximaba, y el olor a albahaca fresca lo aturdió.

Se apoyo en sus brazos, no podía levantarse por más que quisiera, y su lobo golpeaba su interior, como si quisiera salir, y las pisadas se escuchaban cerca.

- Hyung...- escucho una suave voz – Hyung...- un susurro en su oído – Ya estoy aquí...

Cerro los ojos y lo último que escucho fue un aullido de un lobo, lamentándose.

- ¿Hyung? - Abrió los ojos, estaba en el cuarto de Jungkook.

Todo era un sueño.

Un sueño que se sintió tan real.

- ¿Nam? - Alguien volvió a hablar, pero no era Jungkook. Se fue levantando poco a poco para poder quedar sentado y es cuando vio a Jimin, que traía una taza de café en sus manos - ¿Estás bien? - Namjoon asintió.

- Te trajimos el desayuno – dijo el maknae, acomodando la mesita sobre su regazo.

Miro el desayuno y se trataba de yogurt con frutas y cereales. También había un sándwich de queso.

Namjoon levanto su mirada y la dirigió primero a Jimin, después al menor, y de vuelta a la comida.

Jimin se acerco para poner el café con lo demás.

- Necesitas comer, o te hará mal...- estiro su pequeña manita para acariciar su cabello – Recuerda que podrías enfermar...

- ¿Cómo está Jin... Hyung...?

- Dormido, con Tae-Tae. Está bien...

- ¿Te dijo lo que paso? - Se notaba muy preocupado.

- Sí, pero creo que lo mejor es que ambos se calmen. Ahora los dos están heridos, necesitan descansar – le puso una mano en su mejilla, acariciándola con su dedo pulgar – Así que es importante que comas, ¿de acuerdo?

- Sí...- dijo casi inaudible, agachando la mirada. Jimin sonrió, pero de repente, tocaron la puerta.

- ¿Jimin? - Era la voz de Hoseok – Yoongi te esta buscando...

- Rayos...- volteo a ver a Namjoon – Después vendré – se acerco y le dio un beso en la frente.

Cuando Jimin salió, Namjoon miro preocupado a Jungkook.

- ¿Qué paso? - Se sentía mal, de seguro eran los celos de parte de Suga.

- Hoseok Hyung y Yoongi Hyung tomaron ayer en la noche, y creo que Yoongi Hyung entro en celo.

- Oh... ya entiendo...- agacho la mirada.

Comenzó a creer que le estaba mintiendo en problemas a sus amigos.

- Venga, debes de comer – insistió el menor, pero Namjoon no iba a moverse – Anda, yo te ayudare.

Solo lo vio sentarse frente a la mesita con las piernas cruzadas.

- Kookie, no tengo hambre...

- Pero Jimin dijo que te enfermarías si no comes algo. Así que no hay excusas – tomo la cuchara para tomar un poco de fruta – Abre la boca.

- Kookie...- en verdad no quería comer.

- Por favor – suplico, poniendo ojos de cachorro, a lo que Namjoon no pudo resistirse.

Abrió la boca para que Jungkook le diera un bocado. En verdad estaba rico, pero se sentía tan triste.

- Está rico, ¿verdad Hyung? - Lo decía con una sonrisa grande, con un brillo singular en los ojos.

Namjoon asintió, tratando de sonreír, pero no pudo aguantar las lágrimas, y comenzó a llorar.

- ¿Estás bien Hyung? - Era evidente su preocupación porque Namjoon se tapo su rostro con ambas manos.

De inmediato, Jungkook hizo a un lado la pequeña mesita, tratando que no se derramara nada, para poder abrazar a su Hyung.

- No llores...- ahora era el menor que se sentía mal – Perdón Hyung, perdón... Yo solo quería lo mejor para ustedes... Es solo que... Perdón...- él también se había puesto a llorar.

Estaba abrazando el cuello de Namjoon y el rapero también le correspondió el abrazo.

Tal vez Namjoon si tenía el corazón roto, después de todo, Jin era la persona que le gustaba, pero ver a su verdadera personalidad fue descantado todo.

Lo que Jungkook no sabía era que la razón por la que lloraba era por él. Por haberlo hecho cálido. Por compartir su cálido corazón.