Take what you need

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Veía a Namjoon dormir, después de unas cuantas horas, le costo mucho trabajo contenerse, pero al final lo logro.

Pudo ir a la cocina por algo de beber, cuando abrió la puerta del refrigerador, le pareció curioso unos pequeños frascos transparentes, tomo uno, y vaya sorpresa se llevo al ver que eran los supresores especiales que tenía que tomar, o mejor dicho, inyectar.

Entendía que era mentira que Namjoon le había marcado a Jimin, pero creía que en verdad necesitaba los supresores. Realmente ya no entendía absolutamente nada. ¿Quién era el que realmente quería la compañía del alfa?, ¿el omega de Namjoon, o el propio Namjoon?

- Puedo explicarlo – escucho una voz detrás de él.

Jungkook volteo a verlo, tenía las mejillas rojas aun por la fiebre, o quizás por la vergüenza de la situación.

- ¿Te pondrás otro supresor?

- No. Es que... ya me tome... mi dosis...- agacho la mirada – No sé qué esta pasando...- se veía realmente mortificado, a lo que Jungkook dejo el frasco en su lugar para acercarse a su Hyung. Se sentía aliviado de no haber tenido sexo con él, de haberse controlado.

- Hyung...- alcanzo su mano para sujetarla.

- Tal vez sea porque hace mucho no he estado con un alfa...- confeso avergonzado.

No era un secreto que Namjoon no era virgen, pero ahora que sabía que era un omega, y pensar en eso ahora, hacía que su lobo gruñera.

- Volvamos al cuarto – sugirió el menor. Namjoon no dijo nada, solo guio de nuevo, tomado de la mano.

El lobo de Jungkook quería tomar al omega y marcarlo, para así enseñarle que no debería estar con alguien más, pero JK en verdad se estaba controlando demasiado.

Volvieron a acostarse en la cama, pero esta vez un poco separados.

- Eso si que no – dijo Jungkook al no sentir el calor de su Hyung.

- ¿Qué sucede? - No entendía la frase hasta que sintió los brazos alrededor de su cuello – Kookie...- que se aproximaba así, incluso sentir en su parte trasera el calor del cuerpo ajeno. Eso no ayudaba a su celo.

- La próxima vez que quieras estar conmigo, solo pídelo...

- Lo siento...- el calor estaba aumentando, en especial en su vientre.

- No es necesario mentir...

- Alfa...- pronuncio cuando sintió la mano del menor debajo de su playera del pijama.

- Solo debes decírmelo, ¿de acuerdo? Solo pídemelo y lo tendrás.

- ¿Y si...? - Dudo, pero continuo - ¿Y si quiero que... que me...? - Le deba pena.

- Vamos, dilo – le restregó la nariz en el cuello, provocando algunas cosquillas al rapero.

- No puedo – decía entre risas.

- Anda – le seguía frotando su nariz, pero acercando más sus cuerpos, abrazándolo por la cintura para tocar la piel del estomago.

Esas cosquillas pronto se convertirían en caricias, erizando las pieles. Restregando su pelvis en el trasero de Namjoon.

El alfa quería despertar al omega del mayor.

- Dilo omega...- le susurro al oído, llevando una de sus manos hasta un pezón, tocándolo, sin ser brusco.

- Tócame...- jadeo un poco al tacto de la otra mano, acariciando su vientre, levantando su resorte del pantalón – Tócame alfa...

"Bingo!"

Al escuchar eso, Jungkook apachurro el pezón, mientras la otra mano bajaba para masturbarlo. Esta vez lo puedo escuchar jadear. Era la ventaja de estar solos en aquel departamento.

Olfateo el aroma que tanto lo embriagaba, le paso la lengua por el cuello para poder llegar al lóbulo de la oreja y morderlo. Namjoon no lo soportaba, así que volteo un poco, buscando los labios ajenos para besar.

Para que sus lenguas jugaran y exploraran las cavidades ajenas. Siendo una distracción para bajarle los pantalones e ir introduciendo el miembro.

- Jungkook...- lo sentía entrar lentamente – Espera...- trato de detenerlo – Hay condones en el cajón de ahí...

Jungkook maldijo, pero tuvo que hacerle caso, habían quedado en siempre hacerlo así, con condón.

Trato de apresurarse para meterlo de una vez, escuchando los gemidos de Namjoon, algo que le comenzaría a ser adicción, y más si él los provocaba.

Comenzó a mover su mano al ritmo de las mismas embestidas, complaciendo al omega, y sabía que lo estaba haciendo bien porque el lubricante natural que emanaba, era bastante. A Jungkook le encantaba.

- Mierda Kook...- balbuceo Namjoon – Dale más fuerte... ¡agh!

- Lo que tú desees omega – sonrió ante la petición.

Sin salir de él, Jungkook movió a su Hyung para que quedara boca abajo, y este ayudo levantando su trasero, en el cual recibió una nalgada.

- ¡Ah! ¡Alfa! - Grito cuando la mano del menor apachurro el glúteo nalgueado.

- Entonces omega, dime qué es lo qué quieres.

- Que me folles...- le dio una embestida lenta pero fuerte – Más alfa, más...- exigía entre jadeos.

- Lo que pidas omega – se puso en posición para poder tomarlo y seguir masturbandolo al tiempo que le seguía follando. Dándole justo en ese punto que lo hacía gemir más al omega.

El cosquilleo en el estomago que les indicaba que pronto se correrían los dos, al mismo tiempo.

Sintiendo como se anudaban, el menor aplastando a su Hyung, ambos tratando de regular sus respiraciones.

Jungkook abrazo a Namjoon. Sus lobos estaban contentos y complacidos de nuevo, mientras que Namjoon se sentía más confundido que nada.

"𝓛𝓸𝓿𝓮" is just a lie meant to make you 𝒷𝓁𝓊ℯDonde viven las historias. Descúbrelo ahora