Este es mi corazón

Rosa de abril

A veces te siento tan lejos

Tan inalcanzable.

Quisiera caminar por la bruma

De tu voz.

A veces temo perderte

Que una puerta se cierre frente a mí

Y estar solo otra vez.

Descubrir que siempre estuve solo.

Estoy sentado sobre libros

Sobre océanos de palabras

Un gato negro se sienta en mi regazo

Con su ojo cristalino me mira fijamente

Inunda la habitación una roja luz centellante

Rejas azules y esquinas abismales

Los cristales de mil ventanas rotas

Escarban en mis cicatrices

Cálido amanecer, frío despertar

El viento es un remolino de primavera

Me acogen rosados y vastos jardines

Cuando inunda mis párpados la luz de abril

¿Dónde has estado? La puerta estaba abierta

-Cuéntame una historia -la puerta siempre estuvo rota

Y podías visitarme, brisa rosada, inundar el ambiente

Con tu atmósfera erudita, hipocrática, sanadora

Sé que nunca soñaste con ser dueña

De un diablo caído y quebrado

Alas fracturadas, plumas rotas

Porque son para ti, jardines y nubes violetas

Entonces tu voz es aurora

Ondas de un río claro de luz brillante

Tu mirada reclama todas las noches insomnes.

De tu boca escapan mil maldiciones.

Eres relámpagos y cataclismos

Me atacas con kilométricos mensajes adorables

Entonces tu voz es miel en mis heridas

Y ahora es dulce mi amargura

Mi rostro descansa en tus pétalos de coral

Me doy cuenta de que ya escribí esta historia

Y ahora soy yo el protagonista

El final era la mejor parte

era crudo y descarnado.

Sé que tú no eres ficción

Tu naturaleza es poner voz

A todas las novelas

Era una noche como la de hoy

Una página en blanco como esta

Soñaba con un amor

No supe nunca si llegó

Aunque deseo que seas tú

Luego te conviertes en cascada, en relámpago

En meteorito

Mi pasión por ti evapora mis sentidos

Mi pasión por ti estalla y me destruye

Despierta las alas de un ángel dormido

Que al volar desangra el cielo

Has grabado tu voz en mis tímpanos

Deseo acariciar tu cuerpo con mis labios

Probarte entera con las uñas

Fundirnos líquidos y quemarnos desnudos

Juntos en el interior de una estrella

Quisiera viajar contigo a otros países

Verte ganar tu primer estetoscopio

Mirarte leer un libro inmenso

En el silencio

Oculta tras las cortinas de tu cabello bicolor

Quisiera escucharte en los minutos

Oírte dar excusas para todo

Quisiera que me hubieras inventado

Y tu imaginación sería mi casa

Quisiera leer siempre tus comienzos

Porque no escribes medios ni finales

Quisiera conocer todos tus caprichos

Contradictorios e imposibles

Quisiera escuchar tus retahílas médicas

Plagadas de tecnicismos impenetrables

Quisiera ser tan diferente

Pero no puedo

Las cosas son como son, no son distintas

Creo que estoy solo y merezco estar solo

Mi tersa rosa de abril

Quisiera tenerte siempre conmigo

Reparar juntos la puerta y las ventanas

En mis sueños nunca te pareces a ti

Pero sé que eres tú

Porque soy pleno.

***

Nota: Para mí este poema es una brutalidad, sincero en cada letra, en cada espacio. Cosas que agradeces haber vivido, pero hubieras querido no tener que hacerlo. El amor puede ser como una tempestad, sobre todo, cuando se trata únicamente de una fantasía, un espejismo que se desvanece en el aire, algo que nunca existió y nunca iba a suceder.