292 36 0
                                    

¡¿Que significa esto?! — el ruidoso grito de Mikey hizo que marcara mal el pedido del cliente que se encontraba frente a mi. — ¡¡Esto es más que imperdonable!!

Disculpeme un momento señor, mi compañera lo atendera. — Hice una reverencia y le hice un gesto a la chica a mi lado para que lo atienda.

¡No le pusieron la banderita! — Apuntó al plato de menú infantil que tenia frente a él. — ¡Me gusta el menú infaltil porque le ponen bandera!

Me acerque a la mesa donde mi compañero intentaba calmar al rubio que parecia un niño de 6 años.

Cuanto lo siento, enseguida... — toque el hombro del apenado hombre y con un gesto le indique que me lo dejara a mi.
Saque una banderita del bolsillo de mi uniforme y la coloque en su plato.

¿Contentó? — Pregunte mientras miraba al infantil rubio.

¡Gracias, T/n!— su carita se ilumino, por un momento olvide que es un tarado.

Gracias T/n, se me habian acabado las banderitas de emergencia. — Dijo Kenchin sonriendo.

No hay de que, si necesitan algo aqui, pidanmelo a mi, no intimiden a los demás empleados. — Ambos asintierón.

Por cierto T/n, ¿Qué haces aquí? ¿No dijiste que volverias a la Toman? — Este Mikey si que estaba pendejo, ni que la Toman me diera de comer.

Si Mikey volvere, pero aun asi tengo que trabajar para poder vivir y hacer cosas basicas como comer. —

Siempre te dije que podias vivir conmigo.— Dijo el rubio mientrás llevaba comida a su boca, desde que ocurrió lo de mi abuela que Mikey insistio en que viva con él, como si fuera tan fácil.

Ya no tenemos 12 años, Mikey. Tenemos otras responsabilidades.

Si, ya deja de fastidiar a T/n ella puede trabajar y vivir donde quiera.—

Gracias Kenchin, y tu... — Mikey me miro sorprendido— el menú infantil ahora viene con un juguete. — Sonrei mientras ponia frente a él una especie de gato que movia los ojitos, él salto para tomarlo golpeando la mesa, provocando que Kenchin lo regañara. Era tan dulce.

Volvi a mi trabajo, dejandolos comer tranquilos.
Luego de unos minutos cuando me tocaba limpiar las mesas, ya que mi turno temrinaba pronto, pase por al lado de una donde un sujeto rubio leia el menú muy de cerca. Reconoci ese peinado, baje un poco el menú...

¿Qué haces tu aquí escondido?

Takemichi me observo soprendido.

¿Y porque llevas eso?— apunte a unas gafas que llevaba puestas. El rubio tartamudeaba, no podia comprender ni una palabra.

Adios, T/n

Voltie para saludar con la mano a Kenchin que se iba por la puerta principal cargando a un dormido Mikey, cuando regrese mi vista hacia Takemichi este se habia ido.
Solo dejo una servilleta en la el cual decia: "No le digas a Draken."
Tomé el papel y me encogi de hombros, si que era extraño.

Llegue al hospital, sabia que no seria facil, suspire y entre, al dirigirme al piso que una amable enfermera me indico me encontre nuevamente con ese copete rubio.
Me acerque sigilosamente colocandome detrás de él y note como observaba a Mikey y Kenchin, que se comenzaban a alejarse por el pasillo, al parecer los chicos tambien vinieron a verla, seguro fue idea de Kenchin.

— ¿A qué estas jugando, Hanagaki?—el rubio se puso blanco del susto, por un momento crei que iba a desmayarse, pero levanto su mano y cubrio mi boca esperando a que los chicos se alejaran totalmente.
Comenzaba a fastidiarme aun tenia su mano sobre mi boca y con su otra mano sujetaba mi muñeca, él volvio suspirando con alivio cuando los dos rubios amabandonaron la sala por completo, pero su alivio duro poco ya que noto que aun me sostenia, me solto de inmediato, su cara se torno de un carmesi muy intenso y nuevamente las palabras no salian de su boca.
Lo deje diciendo incoherencias solo y me acerque al vidrio que dejaba ver a la herida muchacha conectada al monton de tuvos que ayudaban a que su sufrimiento, al menos el fisico sea menos doloroso. Un nudo se hizo en mi garganta, coloque mi mano sobre el vidrio.

¿La conoces?— Escuche la voz de Takemichi a mi lado, negue con la cabeza.

No necesito conocerla para compartir su dolor...— el miró hacia la joven que estaba alli en una cama, pude notar la empatia en su expresión, podia ser desconcertante pero parecia que era un gran sujeto. — Ella podria ser yo... — El rubio me observo sin comprender.— o mi amiga o mi hermana, o mi mamá o cualquier otra mujer en este mundo y aun asi sentiria su dolor, lucharia por ella y por todas...
— Presione mi mano que se encontraba aun en el vidrio y la conventi en un puño. — asi como luchare por cada persona que ame en este mundo. Ahora solo algo me da curiosidad... — Takemichi trago saliva.— ¿Qué demonios haces siguiendo a mis amigos?

El rubio se sorprendio, me quede apoyada en el vidrio mientras lo observaba fijamente, esperaba su respuesta. Luego de unos minutos de esperar, y no lograr que Takemichi dijera una oración coherente solo sonrei.

Takemichi... — Me acerque a centimetros de él. —si haces algo que haga sufrir a Mikey o Draken —Me acerque más colocando mis labios cerca de su oido para susurrar. — Te mato.—

El rubio se alejo unos pasos hacia atrás mientrás daba un chillido de espanto,

rei por lo ocurrido y tome su brazo estirandolo un poco para que me siguiera.

Necesito enseñarte algo. —

Llegando casi a centimetros de la habitación, me detuve, mi respiración se cortaba.

¿Te encuentrás bien T/n?—Asenti. Nos encontramos delante de una ventana de vidrio que dejaba a ver a una mujer mayor casi en el mismo estado que la novia del amigo de Pa. Takemichi observo hacia la mujer y luego a mi.

Si no fuera por ella, probablemente yo no estaria aqui hoy. — Solte el brazo del rubio y puse ambas manos sobre el vidrio que me separaba de esa mujer a la cual le debia todo. — el día que ella termino aqui jure que dedicaria mi vida a combatir la injusticia y no dejaria que nadie jamas vuelva a dañar a alguien que amo.—

De repente tenia a Takemichi frente a mi con una expresión totalmente diferente a la de él niño lloron que parecia ser.

Jamas haria algo para dañar a Mikey o Draken, a pesar de que no los conozca hace mucho estoy seguro de que ellos no son la clase de persona que todos creen.—Sus palabras me sorprendierón, no esperaba esa reacción. Entonces tomo mis manos entre las suyas y me miro directo a los ojos. — T/n prometo que yo tambien los protegere. — Sus ojos parecian de una persona totalmente diferente hasta que noto que estaba demasiado cerca de mi y se alejó moviendo sus manos como pidiendo disculpas...

Lo... lo siento... yo... Solo no me mates...— Volvi a acercarme a él mientras lo miraba seriamente.

Me recuerdas mucho a alguién... — dije sonriendo con nostalgia.

¿Ah si? ¿A quien? — Dijo nervioso ya que me encontraba muy cerca. Me aleje un poco para volver a la vista hacia el vidrio.

Sabes que, Takemichi... — Volvi mi vista hacia él. — confiare en ti. — Los ojos del rubio se iluminarón. — espero que tu tambien hagas lo mismo conmigo. —Sonrio ampliamente y asintio.

Desde ese día que lo vi en el parque defendiendo al niño, me recordo a él, como se enfrento a Kiyomasa para defender a su amigo, su promesa de proteger a Mikey y Draken.
Sin duda era un gran sujeto. Aunque no dejaba de ser extraño.

Me aleje lentamente por el pasillo no sin antes dedicarle una ultima mirada a ella...

Hasta pronto, abuela.

CRY卍BABY || Tokyo Revengers ||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora