De buen fugitivo a mal fugitivo (+18)

Prólogo.

Cassie y Stella

Esas éramos mi mejor amiga y yo, frente con unos chicos semidesnudos y en sangrados varados en un oscuro bosque

Justo el 31 de octubre ósea Halloween.

Apunto de tomar la peor decisión de nuestra vida, que dará un giro de 80 grados a nuestra vida, no solo a Stella y a mi, si no también a las personas de mi  pueblo y a mis amigos Axel y Alexander y por supuesto el idiota de Henry.

Todo sucedió en un abrir y cerrar de ojos.

Nuestra vida cambio cuando los encontramos.

***
31 de octubre del 2021, Nevada, Las vegas.
Noche de brujas, Halloween
7:40 pm

-Actualidad-

Cassie:

La noche en verdad que estaba escalofriante, un aire de misterio emanaba el ambiente, tanto que me llegue a sentir en una película de terror, no se porque me sorprendía si era normal en Halloween o eso creo. Puede que sea mi cumpleaños pero la verdad es que jamás salía de casa ese día, no porque tenia miedo o algo por el estilo- si claro, si acabas de decir que te sentías como en una película de terror y tu le temes a las películas de terror-me decía mi mente-Ash cállate, la verdad es que mis papas no me dejaban salir el 31 de octubre pero por arte de magia este año me dejaron salir, lo cual no estaba en mis planes, solo quería quedarme en mi casa, acostada, viendo Lucifer y comiendo doritos, pero no.

Y bueno aquí estaba esperando a mi mejor amiga, me había dicho que estaría a las 7:25 y ya lleva 15 minutos de retraso y no daba señales de vida.

Ahs la muy maldita me ha dejado plantada en mi propia fiesta de cumpleaños, la cual ella le pidió a sus amigos que organizaran para mi, no es que no me guste, la casa era muy hermosa, pero lo seria mas, si no hubieran demasiadas personas.

Seguí mirando por todos lados teniendo la esperanza de encontrarla.

Cassie!!!!!!-escuchaba que me llamaban, me gire y no vi mas que a Stella-

Oye Stella!!!!! vete a la mierda-le dije, cree que pude aparecer así de la nada, pues se equivoca y no me juzguen así es nuestra amistad, peleamos, nos decimos cosas feas y al instante nos arreglamos, la mejor amistad del mundo.

Seguí diciéndole cosas feas pero ya no pude mas y salí de la casa, cuando estaba por llegar a la puerta me tropecé con una chica ebria bailando, gua en verdad olía horrible, será que cuando bailo también huelo así?, que cerda, con razón no tengo novio, por fin pude salir y corrí al oscuro bosque.

La verdad ni sabia porque estaba corriendo, talvez quería que Stella me persiguiera y se cansara, oohhh, no, no tengo mas talvez, pero bueno seguí corriendo hasta que me detuve y vi a alguien, no lo vi bien pero podía asegurarme que tenia sangre en su ropa, puede ser Stella, ella se disfrazo de un zombie, si algo muy clásico pero a ella le gustaba lo clásico y viejo, que digo le encantaba un día fui a visitar la casa de Stella y había decorado su habitación con cosas de la antigua Grecia, la verdad me pareció interesante y divertido al principio, pero luego muy asqueroso tenia esculturas de hombres y mujeres desnudos besándose y tocándose, jamás en mi vida olvidaría esas imágenes.

Ok me he desviado mucho.

Ok Stella, ya entendí, me ganaste, ahora sal!!!!!-seguía sin salir, hasta que escuche un grito- Oh Stella- ok ahora si lo admito, tengo miedo, estoy yendo al peligro, justo como en las películas de terror. Oh madre de los ricos y deliciosos Doritos.

Corrí lo que mas pude hacia donde oí el grito, y vi a Stella, le grite, le pegue y no reaccionaba, ok ella no me iba a tomar el pelo.

Oh mi querida Stella, te digo que has fallado, no tengo miedo, ya puedes dejar de fingir-le dije, pero ella seguía sin reaccionar, hasta que dirigí mi mirada hasta donde ella estaba mirando y el terror regreso y si antes tenia miedo, ahora estaba horrorizada, muerta del susto,en shock, en todas las maneras posibles en que una persona podía estar asustada, así nos encontrábamos Stella y yo, no la veía pero podíamos sentir el miedo y el terror en el ambiente, yo se que ella estaba igual que yo o peor.

Hola, soy nueva en esto de escribir historias, espero que les haya gustado a las personas que lo hayan leído.

Besos.