Desde que comence a estudiar en la Universidad, mis padres le pidieron a mi hermano que es Chef que me cuidara ya que estaria lejos de casa, vivia sola en un apartaestudio y mi hermano me enviaba almuerzos con su amigo y compañero de trabajo entre semana, hace mucho decidi dejarle las llaves porque casi siempre estaba dormida o salia y nadie podia recibirle el almuerzo.
Se llama Adrian y era un hombre guapo, estaba casado y tenia hijos lastimosamente, asi que nunca le preste atención, por mas que me diera cuenta como me miraba cuando salia a recibirlo, para después poner cara seria.
Hoy se estaba demorando y moria de hambre.
_Hola. Me saludo el entrando sin siquiera tocar. Yo salia de la ducha.
_Hola. Le dije, era lo único que nos deciamos a menos que mi hermano me enviara un mensaje con el. Me gire hacia mi habitación y el dejo todo en la mesa.
_Me podrías prestar tu baño?. Pregunto.
_Por supuesto, entra. Le dije y entro a mi pieza, donde a pesar de saber que era inapropiado me imagine por un momento que haciamos de todo en la cama. Siguio al baño y no sabia si aprovechar a cambiarme o esperar que se fuera, se demoro un poco y decidi cambiarme rápidamente, o al menos colocarme ropa interior. Pero cuando me estaba subiendo mis pantys el salio, dandose una buena vista de mi culo empinado. Vi sus ojos que cambiaron instantáneamente y termine de subirme mi ropa interior para taparme por completo con la toalla otra vez.
_No sabes lo difícil que me lo haces. Me dijo acercandose, para acorralarme contra el closet ya que retrocedi a cada paso que dio. Me acaricio el rostro mientras me miraba fijamente.
_No crei que fueras a salir tan rápido. Alcance a balbusear, mientras me perdia en sus ojos.
Apretaba con mis dos manos la toalla y el bajo su mano para suavemente tomar una y subirla a un costado de mi cabeza logrando que la toalla se cayera y dejara ver mis senos erectos. Con su otra mano acerco mi cadera hacia el y senti su bulto en mi vientre.
_Mira como me pones siempre. Gruño. Y me quede pensando en ese "siempre". _Aveces llego y estas dormida en ropa interior con tu puerta entreabierta, me siento como un acechador cada vez que vengo y te observo un poco antes de irme.
Con su confesion quede un poco helada, a la vez que me senti un poco caliente, no sabia que fuera tan raro como para espiarme. Y lo mire mal.
_Espero que solo hicieras eso. Es mejor que no vuelvas. Le dije y el se rio un poco negando.
_No solo hice eso. Me dijo el y me pego mas al closet para después empujarme hacia la cama y posarse encima mio. _Quiero enseñarte que mas hice. Dijo y me abrió un poco las piernas con un poco de fuerza porque de los nervios las aprete, ya que esto me confundia mucho.
_No sera nada malo, ya veras. Volvio a decir y por encima de mi panty comenzo a manosearme el clitoris mientras yo me retorcia un poco evitando gemir, acerco su nariz a mi parte íntima y la undia en mi respirando mi fragancia.
_Hueles deliciosa. Dijo y comenzo a besarme a los costados de mi entrepierna acercandose a mi coñito que no se porque me alegre que estuviera depilado. Senti como corrio el panty y comenzo a lamerme ahi en mi clitoris, yo gemia sin pudor y el comenzo a masajearme las tetas dejando de lamerme el coño y asi subiendo hacia ellas para hacerles lo mismo.
_No se como nunca te despertaste, quizas estabas muy tomada. Dijo y recorde las veces que me levantaba mojada e incomoda y abri mucho los ojos, logrando que el soltara una sonrisa. _Si no te gusta, puedo parar. Volvio a decir. Y negue con mi cabeza.
_Me gusta. Gemi. Y el se acerco a mi rostro para besarme, mientras yo acomodaba mis piernas en su costado y dirigia su polla a mi coño deseosa, y lo atraía hacia mi para que me la enterrara toda, nos besabamos demostrando cuanto nos habiamos deseado el uno al otro, el me embestia con fuerza y yo movia mi cadera a su compas, escuchando sus pequeños gruñidos que se trataban de tapar con mis gemidos de placer.
Volvio a comerme las tetas y senti que enloquecia, lo voltee y me coloque encima de el, lo cabalgaba lentamente para fastidiarlo mientras lo miraba con una sonrisa de lado y me acercaba a depositarle besos en todo su pecho muy bien trabajado y así ir subiendo a su cuello, barbilla y llegar a sus labios, me quede ahi debatiendome en miradas con el mientras comenzaba a acelerar un poco mis movimientos porque era yo quien no aguantaba, el se dio cuenta como empezaba a tener espasmos y me volvio a colocar debajo de el para ayudarme, comenzó a moverse lento pero con fuerza y no me apartaba la mirada, sentia el cuerpo ardiendo y no dejaba de gemir, hasta que el se vino por completo dentro mio con una estocada aun más fuerte, qué me hizo arquear nuevamente la espalda, se quedó quieto así mientras me llenaba, pero solo pensar en que había echo eso me lleno nuevamente de morbo y fuerzas y comencé a mover mis caderas con su leche intentando salirse hasta que yo también logré venirme y caímos acostados uno al lado del otro.
_Esto no puede volver a pasar. Dije.
_Pues tendras qué cuidarte, porque no dejaré perder ninguna oportunidad cada vez que venga. Dijo el y recordé como había confesado qué se masturbaba conmigo dormida y me echaba todo su semen.
