Cartas sin dueño (Kiribaku)

Nota #03

Querido Bakugo: 

Hoy salí de casa molesto, tengo un mal presentimiento y lo primero que pensé fue en ti, me preocupa tu bienestar y lo sabes muy bien, tal vez si fui un poco irracional al pedirte que te quedes en casa solo por algo que ni siquiera ha pasado, pero blasty, sabes muy bien que no soporto verte herido sin que yo haya podido evitarlo.

Prometo compensarte cuando llegue a casa, se muy bien que aunque me digas que te da igual en tu corazón te dolió la idea de que te subestimara ¡pero no lo hago! Claro que no, no seria nada masculino de mi parte si desconfiara de la fuerza de mi pareja, pero sabes como soy y lo impulsivo que me comporto a veces cuanto trato de cuidarte, daría mi vida por salvarte y lo sabes bien.

Después de todo el deber de un hombre es cuidar aquello que le de luz y alegría a su vida, y ese algo para mi  eres tu blasty, siempre has sido y serás tu; hoy tratare de acabar rápido mi trabajo para ir a casa, ya quiero que se acabe el día para verte.

Con amor, Eijiro Kirishima

POV Kirishima:

Fui abriendo los ojos poco a poco, sintiéndome extrañamente un poco mas liviano ¿Qué había pasado? Analice un poco la habitación en la que estaba, al parecer estaba en el hospital ¿alguien había salido herido? De pronto una serie de imagenes recorrieron mi memoria haciéndome parar de la camilla en la estaba, camine directamente hacia la puerta pero el sonido de una hoja de papel siendo doblada con cuidado detrás de mi me alerto, gire mi cabeza para ver de quien se trataba y mi corazón se oprimió.

Katsuki estaba sentado al lado de la camilla en la que parecía haber una persona pero no pude reconocer bien quien era, mi vista era algo borrosa, sin embargo mis demás sentidos parecían estar al máximo; podía escuchar a mi rubio sollozar, pero no entendía el porque, camine rodeando la camilla distinguiendo que le rubio tenia una carta en sus manos y una caja en su regazo, forcé la vista un poco logrando ver de forma nítida el cuerpo de Katsuki, lo desvelado que lucían sus facciones y lo que tenia entre sus manos, al reconocer aquel papel se me helo la sangre, aquella era una de las cartas que había escrito "para el" aunque en realidad no pensaba darle ninguna en un futuro, vi su regazo reconociendo mejor aquella caja donde guardaba las cartas además de unas fotografías y......

El anillo.

Me fije en las manos de mi novio que sostenían la carta con cuidado aun sin guardarla en el sobre, notando inmediatamente que en su mano izquierda llevaba aquel anillo que había comprado para el; estaba feliz y frustrado, se suponía que aquello seria una sorpresa y que podría hacerle una propuesta digna de el, pero estaba feliz de que al menos ya conocía su respuesta positiva. Bakugo tomo la mano de la persona que estaba en la camilla y comenzaba a susurrar cosas que no entendía bien, ¿Quién era esa persona? ¿Por qué el rubio parecía tan devastado? dudas similares aparecían en mi cabeza pero una de ellas se sobrepuso por las demás.

¿Por qué el rubio no me miraba? ¿no se había dado cuenta de mi presencia en el cuarto?

Lo escuche susurrar cosas que no lograba entender pero logre ver una lagrima caer lentamente de su mejilla, alejando todas las dudas que tenia para darle paso a una gran preocupación, me acerque a el para escuchar mejor que era lo que decía, a lo mejor así también podría saber quien era esa persona que por alguna razón aun no podía ver con claridad.

K: y-yo también....daría mi vida por ti, lo sabes mejor que nadie-lo escuche susurrar entrecortadamente- n-no tienes una maldita idea de lo que seria capaz con tal de que salieras de esta maldita camilla.

mi corazón se encogió ¿tan importante era esa persona en la vida de mi pareja?

K:  E-en mi asquerosa vida eres de las pocas personas que valen la pena y por la que estaría dispuesto a luchar con todo mi ser, tu eres el principal, aunque seas un idiota a veces......es por eso que te lo pido una vez mas, despierta, despierta por favor Kirishima.

¿que?......

me acerque a Bakugou para tratar de hallar una explicación, ¿Cómo esa persona podía ser yo si yo estaba justo a su lado? sin embargo cuando solo me faltaba menos de un metro para que mi mano llegara al hombro del rubio con la intención de llamar su atención, lo que parecía ser una pared hecha de aire detuvo mi avance, sorprendido y confundido trate nuevamente, teniendo el mismo resultado, comencé a asustarme y a golpear aquella barrera.

-¡¡Katsuki!! ¡¡Katsuki!! ¡¡mi amor soy yo!! estoy aquí, ¡¡escúchame!!-el rubio parecia ajeno a mis palabras lo que hacia que me desesperara mas, parecia ser invisible ante la presencia del rubio.

K: yo debi estar contigo, se que seguramente me dirás que no es mi culpa, pero mierda, eres mi pareja, se supone que no debía dejar que esto pasara, por fin entendí lo que sentiste ese día, maldita sea te juro que si, solo que en esa ocasión yo solo salí ignorando tu petición y esta vez.....ni siquiera tuve el coraje para decírtelo- recordé el momento al que se refería, estaba escrito en mi tercera carta- a lo mejor si lo hubiera hecho no estaría pasando toda esta mierda.

-¡Katsuki! ¿¡que esta pasando!? me estas asustando, ¡yo estoy aquí! estoy a tu lado ¿¡porque no me oyes!? ¿¡porque no me ves!?-grite desesperado mientras golpeaba la pared en un intento de romperla, pensé en usar mi quirk pero cuando lo intente no funcionaba, causando que mi miedo aumentara a cada segundo.

K: tal vez.......si hubiera abierto la maldita boca, a lo mejor no te hubiera detenido, pero podría haber ido contigo y las cosas serian diferentes, ese puto villano no te hubiera casi matado, yo no estaría aquí hecho una mierda pensando si en realidad nunca vas a regresar conmigo a casa.

-¿¡de que estas......-las palabras de Katsuki me atravesaron en un helado escalofrió, recordé mi pelea con el villano que enfrentamos Tamaki-senpai y yo.....no puede ser.

Forcé al máximo mi vista hacia la persona que estaba en la camilla, al inicio solo parecia hacerse mas borrosa la imagen hasta que finalmente pude ver con claridad su cara, mis ojos se abrieron como platos y comenzaron a humedecerse, puse mi mano contra la invisible barrera en busca de algún soporte, cosa que fue en vano porque sentí como todas las fuerzas se desvanecían cayendo de rodillas en el suelo.

no no no no no

esto no podía estar pasando.....

esto no era verdad.......

sentí como mis lagrimas bajaban por mis mejillas permitiéndome soltar un grito a autentico dolor y terror, había faltado a mi promesa con Katsuki, no volví a casa ese día y ya no lo podría hacer nunca.

yo.......estaba muerto