Thimotee: Crush

Mi último año escolar

-¡No te lo creo! Violeta y Tom... Juntos.. como pareja... Ah quisiera estar sorprendido pero no lo estoy en absoluto.- exclamó Timy mientras se paraba frente a nosotros.
-Hola Thimotee, que gusto verte.- le dije mientras tomaba a mi novio de la mano.
-Hola... Amiga... ¿Cómo van las cosas por tus rumbos?.- me preguntó Timy parándose frente a mi.
-Muy bien gracias y tú ¿Cómo estás?.- le cuestione.
-Mucho mejor.. ya casi no sueño contigo.- sonrió forzadamente para después marcharse. Al oírlo decir esas palabras sentí un nudo en la garganta pero pretendía no prestarle atención pues Tom me observaba. Nos fuimos a mi casa, nos cambiamos de ropa y salimos a la plaza con mis amigos, sorpresivamente no me había encontrado a Dan. Tenía curiosidad no voy a negarlo sobre que había Sido de su vida, pero supongo lo tenía que dejar ir. Pasando una semana en mis tierras Tom y yo nos despedimos de los mios para después marcharnos a París a un viaje que había organizado Tom para nosotros dos. La idea era tan romántica que me enternecia, amaba lo cursi y detallista que Tom era conmigo, me hacía quererlo cada vez más.
Llegando a París nos hospedamos en un elegante hotel con vista a la torre Eiffel. Era la primera vez que dormíamos juntos en la misma cama y ambos estábamos bastante nerviosos....
-¿Segura que quieres que duerma aquí?.- pregunto Tom temeroso.

-Claro cielo, no pasa nada, ven aquí.- le respondí mientras me acostaba. El se acostó a mi lado, quedamos frente a frente mirándonos así que decidí romper el hielo y besarlo. No podía ser más perfecto, era la primera vez que me acostaba con el, en la ciudad del amor, yo estaba segura de mis sentimientos por el y el hecho de que se formalizaban más las cosas me hacía sentir mas segura de nosotros dos.
El viaje a París fue increíble, nos la pasamos vagando día y noche, incluso nos tomamos el tiempo de aprender un poco de francés, ambos nos motivabamos a seguir creciendo culturalmente. Lamentablemente nuestras vacaciones acababan, regresábamos a Inglaterra nuevamente para ingresar a nuestro último año de universidad. Si mi yo de ahora viajará al pasado, no me lo creería de todo lo que ha cambiado, de todo lo que yo he cambiado, mi entorno no era el mismo, mi círculo de amistades tampoco lo era y en definitiva no terminaría la carrera con quién yo creí que la terminaría, pero ¿Saben? No me arrepiento de nada, haría las cosas de la misma forma si volvieran a pasar.
Nuestro último año era crucial pues teníamos que empezar a crear lazos laborales con nuestras prácticas profesionales, pues era lo ideal. Comenzar a trabajar antes de terminar la carrera era lo que más deseabamos Tomy y yo. Mi propósito era participar en una convocatoria de guionismo y dirección para Netflix y aunque Tomy no tenía muy en claro su rumbo sabía que quería dedicarse a cuidar animales salvajes y no solo enfocarse en lo doméstico. Éramos dos jóvenes que ambicionabamos grandes cosas, teníamos la pasión y preparación a nuestro favor, ¿Que nos detenía? Nada.
Nuestros exámenes finales estaban comenzando y yo tenía una importante competencia para trabajar junto a uno de mis directores preferidos el gran Zack Snyder. El concurso consistía en hacer un guión para una película, el más original iba ser elegido para hacerlo película con Zack como director y Netflix como la casa productora. Tom y yo estábamos exhaustos, pues con los exámenes y trabajos finales apenas y dormíamos y a pesar de que no estábamos mucho tiempo juntos últimamente, esto sería pasajero pues una vez terminado todo esto podríamos estar más tiempo juntos de nuevo.... ¿O no?
Terminando mi último examen llame a Tomy para salir a cenar apenas saliera de sus exámenes:
-Hola amor, ya salí de mi último examen, podemos ir a cenar apenas termines. ¿Que te parece?-. Le pregunté.
-Si nena, ya entraré a clase paso por ti más tarde.- contesto Tom.
Me fui a mi dormitorio, me prepare para nuestra cita y me dispuse a esperarlo.
Tom llamo a mi puerta y nos fuimos a cenar pizza justo como nuestra primera cita.
-Y... ¿Que tal tus finales?.- le pregunté a Tom mientras esperábamos nuestra pizza.
-Bastante bien de hecho....-. me contestó con la mirada ida.
-De acuerdo, ¿Que sucede?.- le pregunte al darme cuenta que estaba distraído.
-Bien.... Mi profesor el doctor Harold abrió un proyecto para ir a la Antártida para resguardar focas en peligro de extinción...-. me dijo sin mirarme a los ojos.
-¡Eso es genial! Y vas a participar ¿No?.- le pregunté emocionada.
-Si.... El problema es que el proyecto comienza apenas termine este último año... Y sería irme al menos unos 3 años, creo que sí en algo estamos de acuerdo es que las relaciones no funcionan a larga distancia.- me dijo sin mirarme a los ojos.
Apenas escuché estas palabras un nudo sentí en mi garganta, estaba claro, el iba a terminar conmigo, me límite a limpiar mis lágrimas y decirle que estaba de acuerdo. Pero el no me miraba, creo que temía romper en llanto si me miraba llorar.
-Sabes que te amo, ¿Verdad?.- me dijo mientras sostuvo mis manos.
-Yo también te amo, eres el amigo más increíble que pude tener Tomy y de verdad deseo que triunfes en lo que sea que hagas.- le respondí mientras besaba sus manos entre lágrimas. Era nuestra última vez juntos como pareja, así que decidimos no pasarla lamentandonos, todo lo contrario, reímos, bebimos y nos divertimos como dos enamorados sin pensar en el mañana.
Nos graduamos juntos, nos tomamos mil fotos, lloramos y probablemente fue una de las despedidas más duras que tuve porque Tom fue mi salvavidas en un momento muy difícil de mi vida, el jamás me dejó sola. Veía irse a un joven que estudió veterinaria para convertirse en un hombre que lucharia por los animales. El haría grandes cosas, podía sentirlo.