Donde Elsa será contratada para cuidar a un adolescente que está enamorado de ella. Y dónde también nos daremos cuenta de que los extraños pueden estar más cerca de lo que creemos.
❛ 🎃 ➻ murder ; blood ; psycho ; halloween special.
❛ 🎃 ➻ conten...
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Y sin dudarlo, jaló el gatillo, disparando en dirección a la rodilla del azabache, que gritó de dolor por el intenso sufrimiento que estaba experimentando. Su pantalón negro no tardó en volverse mucho más oscuro en la parte de su rodilla, escuchó la carcajada de Jack que hizo a Elsa llorar.
── ¡No, basta! — gritó dolída y entre lágrimas, intentó dar brincos con la silla para acercarse a Tadashi pero era bastante peso ya que Jack se había puesto detrás de ella para sostener sus hombros con fuerza, afirmandola en su lugar.
── Dime, ¿Qué tan buena es en la cama? — vuelve a su tono descarado, apoya su mentón sobre el hombro de Elsa y aspira la fragancia que siempre porta, lavanda. Con su mano sostiene el rostro de Elsa, apretando sus mofletes entre sus dedos, sintiéndola removerse inútilmente bajó su agarre.
── Vete a la mierda, jamás podrás saberlo imbécil, Elsa nunca estaría con un chico como tú, jodido inmaduro que eres.
Jack frotó sus dedos en sus sienes. ── ¿Eso crees?
── Debes estar lo suficientemente retorcido y demente como para que me intentes forzar a hacer algo que no quiero, porque ni en mis cinco sentidos se me ocurrirá acostarme con un niño. — sentenció encolerizada.
── ¿L-la has oído? — gimoteó el azabache.
── ¡Cállate por una maldita vez!
Otro disparo.
La otra rodilla de Tadashi sufrió las consecuencias y soltó un grito desgarrador, gritó que fue acompañado por las súplicas de Elsa, rogando que parase con aquella locura.
── ¡Basta! Amor, por favor ¡Escúchame! — exclamó, el rostro de Tadashi se retorcía, y parecía ir perdiendo el hilo de la situación, en cualquier momento podría desvanecerse por el dolor que estaba sintiendo.
── Y-yo... ¿Qué he hecho?
Elsa alzó la mirada enfadada y con ojos acuosos, se dió cuenta de que Jack se había alejado para ponerse frente al japonés, lo vió llorar desenfrenado y Elsa solo pudo arquear la ceja consternada, aunque aquello ya no le importaba, quería salvar a Tadashi, tenía que hacerlo.
── ¡Elsa, perdóname! Y-yo perdí el hilo de lo que hacía, planeé están broma con Kristoff, nosotros creíamos que... Lo lamento.
A Elsa le dolió la cabeza en esos momentos, quiso pensar si el causante de eso fue el fuerte somnífero que tomó o simplemente eran las distintas situaciones que había llegado de repente para atormentarla.
No podía creer más en Jack, todo había sido tan convincente, aunque podría sacar algo de provecho. Desvió su mirada hacia detrás de Frost, Tadashi se veía agotado y sangrando bastante.
── ¡Si tanto lo sientes déjanos ir, Imbécil! ¡Son unos jodidos psicópatas! — exclamó Elsa.
── Espera... Por favor, ¿me acusarás con mis padres, verdad?
