愛 : true kinda love [flufftober 2021]

drunk confession

el haber terminado la preparatoria era todo un logro, ¿no es así?, claro que debe ser festejado.

para ello agradecían mucho aparenten más edad y que algunos de ellos ya hayan obtenido su identificación.

– entonces, ve tu por el alcohol yo por la botana –

el menor asintió entrando el mismo tiempo que el mayor pero tomando rumbos diferentes ya dentro.

jay saludó al hombre en la caja, tras de él había algunas variedades de alcohol

– ¿en cuanto tiene el whisky? –

el hombre le miró algo dudoso pero aún así le dió el precio

estaba algo sorprendido después de oírlo, ¿desde cuándo el alcohol era tan caro?.

– deme dos botellas por favor –

el hombre volvió a darle esa mirada extraña, después se dió la vuelta tomando dos botellas poniendolas sobre la barra.

tras de ella llegó heeseung con varias botanas.

– identificación – soltó el hombre

jongseong buscó en su cartera y la encontró dejándola a la vista.

el hombre asintió con la cabeza.

– ¿todo junto? –

el peli negro sonrío de lado asintiendo y pagando por todo.

salieron de la tienda subiéndose al auto de heeseung dejando las cosas en la parte de atrás.

𓇿𓇿𓍯𓇿𓇿

entre los 7 decidieron no asistir a la la fiesta de graduación que les armaba la escuela, simplemente querían pasar el tiempo como a ellos les gustaba

si iban a festejar lo harían bien.

aún que para ellos su versión de diversión era simplemente ir al parque a disfrutar el frío de la noche con algo de alcohol y botanas mientras hablan y rien de cualquier cosa.

– dios, no puedo creer que iremos a la universidad –

habló sunghoon bajando de la rampa en patineta.

– lo sé, es tan extraño, no creo ser mentalmente maduro y responsable para eso, solo quiero vivir como lo hacía hasta ahora –

le respondió el peli rosa de mejillas bonitas, cosa que todos recalcaron como opinión compartida.

– en realidad no quiero estresarme, si voy a hacer lo que me toca quiero hacerlo con ustedes, siento que así lo haría bien –

está vez comentó el menor del grupo.

– riki, con nosotros o no nunca haces nada –

habló su mejor amigo, jungwon, el chico de los hoyuelos, haciendo que todos los presentes soltaran una carcajada mientras riki lo perseguía.

jongseong veía a jungwon y se tomaba el privilegio de viajar el paraíso el tiempo que la circunstancia se lo permitiera,
hace tiempo tenía sentimientos por jungwon, pero en sus planes a corto plazo, no estaba decirlo.

la noche se pasó volando, pronto darían las 2 de la mañana, las botellas estaban vacías al igual que las bolsas, todos se sentían cansados de tanto reír y llorar, pues se habían sincerado más de lo que esperaban, cosa del alcohol y sus efectos.

todos prometiendo verse la mañana siguiente empezaron a tomar camino a sus casas.

jungwon se ofreció de acompañar a jongseong pues no vivían tan lejos uno del otro.

camino a casa hablaron un poco de alguna cosa que se les venía a la mente, pero nada como para una conversación como tal, el silencio era cómodo, los ruidos de la calle sus cuerpos algo juntos, era simple.

pero entonces la cabeza enamorada de jay más el alcohol en su sistema hicieron algunas movidas.

– jungwon, ¿te molesta si te confieso algo? –

jungwon le miró intrigado, pero dispuesto a oírlo, se tenían la confianza suficiente, la segunda persona con la que más cercanía tenía era él.

– dime –

– ¿prometes no enojarte? – se detuvo haciendo a jungwon parar igual

– ¿porque lo haría?, jong no somos niños, se cuando perdonar una estupidez pequeña –

jay sonrío ante eso, sus mejillas se tiñeron un poco mientras cortaba distancia con jungwon.

en realidad no sabía bien que hacía, y jungwon no sabía bien porqué no lo detenía, pero el tener a su mayor tan cerca, rodando sus labios y con la mano contraria acariciando su pelo lo hizo sentir tan bien.

lo cuál hizo que cortará la mínima distancia que les quedaba, simplemente dejándose llevar más por sus sentimientos que por su moral.

un beso con sabor a whisky y sabritas de queso, no muy buena combinación, pero esta tampoco era la mejor situación.

– ¿perdonarías un corazón enamorado, wonie? –

jay solía usar palabras profundas al hablar sobre cosas serías, y jungwon pudo darse cuenta, aún que esto pareciera un drama de esos que le encantan ver

pero en realidad no tenía tiempo para pensar en si esto era una estupidez o un cliché, en su cabeza solo reinaba la idea de que su amigo le amaba, no sabía que tan lindo o romántico podía ser jay, pero para eso estaba él, para descubrirlo.

– dios jay, no digas estupideces y bésame de nuevo –

el rubio sonrío dulce para volver a besar al chico que lo tiene encantado, nuevamente bajo la luz de... ¿un farol?