Llego al colegio amplio y para buena o mala suerte nadie me conoce. Aún así, tengo el extraño presentimiento de que sucederá algo anormal aquí.
Solo trato de concentrarme en los demás que pasan animados sin necesidad de esforzarse y yo siendo un solo extra en este lugar. No mentiría al decir que es reconfortante el estar solo.
Observó mi reloj y por lo que vi llegue veinte minutos antes de la primera hora, después de un tiempo buscaba mejor mi salón.
-Hey, chico ¿estas perdido?--Menciona un tipo con la sudadera deportiva del colegio tal vez de el equipo de soccer...
-Busco el salón 25B soy nuevo...
-Carne fresca... espero no acaben con él- susurra uno al primero
-Es en el segundo piso, suerte con la dark... es al mismo que voy. Vamos te muestro el camino- me quedó intrigado pero le sigo el paso.
Avanza un poco rápido pero ahora me doy cuenta que debo mejorar si quiero seguir y terminar mis estudios en este pequeño pueblo. Aunque no esta del todo mal...
Entro en el aula. Y están lo que es común el grupo de los rezagados o como en un futuro me enteré: los cuervos, chicas lindas en el fondo; supongo forman parte del equipo de porristas y como siempre los grupos de personas como yo, los normales o lo que consideraría los que no pertenecen ni les parece adecuado formar parte de un grupo.
Por inercia, avancé por el lugar y me siento al principio de la pizarra. Miro el horario dando con el pie derecho el inicio de mi nuevo curso... Matemáticas... al menos un profesor o maestra que entenderé... o eso espero.
Pasado un rato varias chicas se me acercan no me sorprende soy alguien bien parecido. Alto, atlético, un poco callado pero un tanto animado.
Algunas me dicen de cualquier cosa pero no presto mucha atención a ello, se empiezan a presentar y solo escucho como hablan de si me unirme a un equipo deportivo, yo solo sonrío un poco no es mi interés en esta ocasión.
Escucho como abren la puerta ellas solo giran un poco la cabeza y ruedan los ojos por fin guardan silencio pero supongo es por la llegada del profesor, grave error.
Una chica llega corriendo al aula e inmediatamente me fijo en ella... Mediana estatura, ojos café, al igual que su cabello. Son cerca de las 8:30 am y ella evitando una clase el primer día. Ni yo me atrevería, pero que cosas dices hasta hace unos meses podrías ser ella señor perfecto.
Saluda a un chico casi escuálido a mi parecer la pone al corriente de la clase mientras veo al otro chico deportista de la mañana acercarse rápidamente cerrándole el paso a ella...
-Y dime preciosa aceptas o no esa salida... ya sabes vamos por una cerveza y después podemos divertir...- no termina de hablar de su propuesta a lo que ella le interrumpe.
-Aléjate idiota o te patearé en la entrepierna- menciona sin expresión alguna.
Dirigí mi mirada a la mochila que llevaba ella. Un poco estorbosa pero cada quien sus gustos. De un momento a otro quedó sorprendiendo al igual que el barullo del salón con un bofetón de su parte al chico Y por lo que veo haciendo que de su boca comience a sangrar.
-Déjame en paz Arthur...- camina pasando frente mío a lo que las chicas solo se quedan estáticas siendo empujadas por ella, se dirige a la última fila cerca de las ventanas que dan al área deportiva del campus.
Me quedo intrigado, mientras saca los auriculares y veo coloca algo para pasar el rato.
Menos mal civismo no lo tendremos hasta en un mes. Parte positiva eran dos horas. Que se convierten en dos horas afortunadas para mi. Salí del salón y me dirigí a la cafetería.
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Hola queridos cerecitos, como se darán cuenta he trabajado un poco en la narrativa a comparacion de como era el anterior libro. Esta vez espero sea una historia de su agrado. Y sin duda tengo mas ideas por desarrollar.
Besos 💋 💋
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Frialdad interior
Novela Juvenil¿Qué oculta en realidad?, ¿Porqué no escucha a los demás? sobre todo porque a mi es a quien siempre acude cuando tiene problemas. No le interesa lo que llegues a pensar de ella. Sin duda sus ojos son los cuales te dejan abrumado, pero tu eso ya lo s...
