Suave Contigo - Taiju x Lectora

18

Advertencia: este capítulo contiene smut!

Te asustaste un poco cuando viste a Taiju abrir de golpe la puerta de tu cuarto.

-"Hey! Qué pasó con tus modales? Golpea antes de entrar!" le dijiste molesta mirandolo

Algo le pasaba.

Tomó tus hombros con cuidado y te miró, su rostro estando rojo.

-"Quiero- Quiero hacerlo"

-"Eh?" te quedaste sorprendida ante sus palabras mientras lo mirabas, aún analizando lo que dijo "En serio?"

-"Si, por favor- no puedo quitarme la idea de la cabeza-" suspiró

Sonreiste levemente, sintiendote orgullosa de hacer que se sienta de esa manera, pero no querías decir nada al respecto porque seguro se iba a terminar enfadando.

-"Yo también quiero" dijiste tomando sus mejillas "Ah- pero puedes ir a la farmacia primero?"

-"Si, seguro" asintió

Una vez lo enviaste, y regresó con su rostro más rojo que antes por lo que le mandaste a buscar. Reiste levemente dejando besos en su rostro intentando apasiguarlo.

-"Es para estar seguros! No te pongas nervioso" besaste la punta de su nariz acariciando sus mejillas

-"La próxima los vas a comprar tu..."

-"Jeje~ cuando yo este tan necesitada como tu ahora, iré a comprar yo~" besaste sus labios

Hizo una mueca de molestia por un momento, pero desapareció cuando besaste sus labios.

-"Tú como sabes tanto?"

-"Porque a diferencia de ti, si le presto atención a las clases y me gusta informarme para no tener problemas de ningún tipo" le sacaste la lengua riendo leve

Dieron comienzo a su pequeño incio de sesión con algunos besos, ambos estaban igual de entusiasmados en la situación. Taiju aunque lo quisiera negar, era quién más tenía sus manos encima de ti, ya quitando tu ropa de en medio.

Procuró prepararte bien para recibirlo, primero con su boca y su lengua, haciendo uso de las anteriores experiencias que había tenido contigo y de lo que le habías enseñado, para luego seguir con sus dedos.

Te sentías en las nubes, Taiju era alguien que le costaba un poco aprender las cosas, tener la paciencia de escuchar y entender, incluso hay que admitir que es terco. Pero una vez lo hacía, lo mantenía siempre en su mente. Y estaba utilizando todo lo que aprendió para hacerte sentir de la mejor manera posible.

Le daba completa atención a tu entrada a la vez de que a tu clítoris, incluso atención a tus senos, teniendo uno en la boca y jugando con tu pezón.

Cuando quisiste devolverle el favor, se negó, diciendo que no quería que fuese sobre su propio placer.

-"Sabes ponerte eso?" dijiste mirandolo en una sonrisa viendo como abría el preservativo

-"Yo sé, yo sé" mencionó ya nervioso

Le diste unas suaves palmadas en su brazo, y terminaste abriendo y colocandose tu misma al preservativo, mientras le dabas besos diciendo que no tenía de que apenarse.

Te daba muchar ternura que él estuviese de esa manera, ya que él mismo quiso llegar a esto contigo.

-"Te sientes más cómodo si lo hago así?" preguntaste subiendote a su regazo, tus muslos rozando con su miembro

-"Si, quiero que me digas si te sientes incómoda o si duele... De acuerdo?" dijo colocando tus manos en tu cadera

Asentiste y le diste paso a tu interior, bajabas con cuidado sobre él, ahogando pequeños gemidos y jadeos mordiendo su hombro.

Su lengua y sus dedos, no eran nada comparada al tamaño de su miembro.

-"Tomalo con calma" dijo suave acariciando tu cabello con una mano y tu cadera con la otra "No te apresures" sonrió levemente viendo tus piernas temblar "No vas ni por la mitad, tranquila"

-"De...demasiado..." dijiste en un suspiro aferrandote a él con fuerza

-"Quieres usar el lubricante que me hiciste comprar?" preguntó a lo cuál sólo pudiste asentir

Tomó la botella del mismo para utilizarlo, intentando facilitar el proceso.

De nuevo regresaste a tu posición, sintiendo de nuevo esa mezcla entre dolor y placer en tu parte inferior.

Te tomó tu tiempo llegar a hacer que esté completamente dentro.

En todo el proceso Taiju intentó animarte con palabras que sólo hacían que las paredes de tu entrada apretaran más su miembro.

"Tú puedes hacerlo"

"Se siente bien"

"No te apresures"

"Puedes tomarlo completamente"

"Eres mi mujer ahora"

"No te detengas, hazlo por mi"

Eran algunas de las cosas que podías escuchar de su parte, y solo asentias con torpeza, no pudiendo formar palabra alguno.

-"Voy a moverme, si?" dijo descansando sus manos en tus muslos

-"Mmm..." murmuraste asistiendo mientras lo abrazabas

Un gemido de escapó de tus labios cuando se movió por primera vez.

Primero su ritmo era lento, aunque te hacía brincar la manera en que lo hacía, ya que era despacio pero profundo.

Poco a poco fue aumentando más el movimiento de sus caderas, y apretó con firmeza tu piel, dejando marca de sus manos en esta.

En este punto sólo gemias palabras incoherentes o su nombre de una manera distorsionada.

Cuando clavaste tus uñas en su espalda, se detuvo entre jadeos y besos a tu cuello.

-"Estás bien?... Quieres parar?" preguntó

-"No... No... Sigue..." le susurraste casi babeando mientras buscabas sus labios para besarlo

Continuaron con su noche apasionado.

Mientras los pobres hermanos menores oían el rechinar de la cama.

Ninguno de los dos dudó en escaparse de la casa con algún amigo en esta situación.