01

333 32 11
                                    

Iida sabía mantener la compostura. 

O al menos eso era lo que él creía y los demás sabían.

Entonces, ¿Por qué sus nervios lo controlaban? 

Era algo inusual, más no algo nuevo. En ocasiones anteriores ya le había ocurrido, y todas tenían algo en común: Izuku Midoriya era parte. 

No le gustaba tener ese comportamiento frente a su amigo. Se sentía patético al mostrar tal faceta desconocida e incontrolable ante alguien tan impresionante como lo era su compañero de clase.

Por eso, cuando el chico de rulos que hacía que sus mejillas se tornaran rosas y que su corazón latiera rápidamente se acercó a él para pedir ayuda con una materia, odió decir que si. Sin siquiera pensar si estaba ocupado o no, accedió a una petición. Aunque la sonrisa del contrario suavizaba su culpabilidad y reprimenda interna.

Solo le quedaba esperar a que cualquier ente todopoderoso que existiera lo observara y le tuviera piedad.

______________________________________________________________________

Al llegar la hora de salida, el corazón de Tenya volvió a latir con rapidez. Realmente estaba nervioso; era la primera vez que se quedaría con Izuku a solas por tanto tiempo.

Antes ya habían hecho pijamadas o juntas de noche, pero era con todo o casi todo el grupo. Uraraka a veces no podía, pero Asui siempre asistía, ya que sus padres estaban en casa los fines de semana y se podían encargar de sus hermanos, y cuando era en un día de semana simplemente se quedaban en su casa para ayudarla.

Pero esto era diferente. La madre de Izuku estaba quedándose en casa de una amiga del trabajo, ya que estaba en sus últimos meses de embarazo y su esposa no podía estar mucho tiempo con ella por estar trabajando; los padres de Iida confiaban en su amigo y obviamente lo iban a dejar quedarse en su casa si era para estudiar (y si Midoriya lo preguntaba). 

Así que iban a quedarse en la casa de los Midoriya. Solos. Estudiando anatomía.

Pensamientos completamente inapropiados (para él) inundaron la cabeza del peliazul. Se sentía culpable por darle un significado tan desubicado a una simple sesión de estudio. Y era peor cuando esto involucraba a su tierno e inocente compañero.

Recién se dio cuenta de su trance cuando el dueño de sus pensamientos comenzó a agitar su mano de arriba a abajo frente a su rostro.

- ¡Tierra llamando a Iida! ¿Estás bien? - preguntó el contrario, con una clara mueca de preocupación. Bueno, casi cualquier persona se preocuparía si su amigo se queda estático mirando a la nada y con la cara roja.

- Si. - fue la única respuesta que su cerebro pudo procesar teniendo a Izuku tan repentinamente cerca. 

Iba a comenzar a excusarse cuando vio que Midoriya se quedó procesando su respuesta, pero no pudo decir una sola palabra cuando él se comenzó a reír.

- Lo siento, solo fue algo gracioso. Pero no me estoy riendo de ti, lo juro - se apresuró a aclarar, aunque al peliazul lejos de molestarle, se deleitó silenciosamente con la risa del contrario.

Le sonrió y negó ligeramente con la cabeza - Está bien, no importa. ¿Vamos?

Cuando el pecoso asintió con entusiasmo y un ligero sonrojo, Tenya imaginó todo tipo de escenarios. A pesar de esto, solo guardo sus cosas y salió con su amigo hacia su casa.

______________________________________________________________________


anadie leimporta,, pero revivi

 y ui,, relargo wuajajaja 

m qeria matar,, no tenia ganas d escribir,, y estaba un poco ocupado,, pero ahora puedo escribir y no estoy tan ocupado jujuju

bueno xao

bueno xao

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
𝖘𝖊𝖓𝖎𝖓 𝖆𝖓𝖆𝖙𝖔𝖒𝖎𝖓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora