Konoha es un lugar donde la festividad anual favorita es la noche de brujas. Así que los Shinobis cada año se encargan de organizar la más grande fiesta de disfraces.
Hinata Hyūga es tímida, callada e inocente por naturaleza, en su mente no está pr...
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Naruto
La luz de la luna iluminaba los suaves rasgos de Hinata, haciendo que su cremosa piel pareciera de porcelana, tan frágil y brillante.
Sabía que ella me amaba, lo supe desde su confesión en la batalla contra Pain, en ese momento no supe como reaccionar, ni tampoco tenia claro mis sentimientos como para saber como responderle. Estaba tan absortó en traer a Sasuke de vuelta a Konoha, quería salvar a mi amigo de la oscuridad, que me olvide de mis propios sentimientos y aún ahora seguía confundido.
Claro que quería empezar algo con Hinata, pero otra parte de mi no quería dejar a Sasuke fuera de la ecuación y no me malinterpreten no me gustan los hombres, para nada. Solo que el estaba tan solo al igual que yo. Que me es tan difícil dejarlo de lado.
Aspiré el aire fresco de la noche y escuché como Sasuke se sentó en el tercer columpio. Y ahí estábamos los tres compartiendo la última noche de Octubre, con una luna llena hermosa.
¿Qué estaría pensando el teme de todo esto? Después de todo fue su idea salir con Hinata fuera de la fiesta.
¿Sentiría Sasuke algo por Hinata? o ¿Hinata podría desarrollar sentimientos por Sasuke? y si la respuesta fuera si, ellos... ¿estarían dispuestos a incluirlo?
Dios, parece que después de pasar tanto tiempo con Ero-Sennin, también me estoy convirtiendo en un pervertido.
Pero claro que no estaba pensando en Hinata solo en la forma tentadora. Sabía mejor que nadie que ella no era esa clase de chica para pasar el rato. Ella estaba hecha para querer conocerla y compartir tus secretos, con la que un hombre tenía citas y cuidaba. Con la que finalmente se casaba. De ninguna manera era el tipo de chica a la que un hombre compartía con su mejor amigo por la noche.
Ella es demasiado inocente.
Lo más seguro es que si él les proponía algo así, no solo Hinata huiría, también Sasuke.
Todo el tiempo en el que Naruto estuvo meditando y debatiendo consigo mismo en su cabeza, no notó que Hinata y Sasuke estaban charlando de lo más tranquilos, como si llevaran tiempo de ser amigos.
Si se quedaban más tiempo así terminaría por proponerles lo impensable, así que decidido pensó que lo mejor sería irse, llevándose a Sasuke por supuesto.
—¡Cielos!, ya es demasiado tarde para mí. Sasuke tú departamento esta cerca de aquí ¿Verdad? No quiero irme hasta el mio.
—No nos importa si te vas ¿verdad, Hinata? —La pregunta de Sasuke fue dirigida rápida como un Kunai.
—Supongo que no.— Contestó Hinata encogiéndose de hombros, un sonrojó invadió sus mejillas, el color cubrió su piel como una manta rosada.