Desperté de repente en un ascensor rodeada de cajas y animales encerrados en jaulas. Me costaba respirar, tenía la sensación de haberme ahogado. No entendía nada. Mi cabeza empezó a llenarse de preguntas y más preguntas: <<¿Cómo he llegado aquí?>> <<¿Qué coño es esto?>> <<¿Hacia dónde sube?>>. Hasta que me dí cuenta de que no tenía la respuesta a ninguna de esas preguntas. Y peor aún, no recordaba absolutamente nada. Unas ganas inmensas de llorar me invadieron, y decidí no reprimirme, a fin de cuentas, ¿qué otra cosa podía hacer?. Me arrastré hasta una esquina del extraño ascensor, pegué mis rodillas a mi pecho y empezé a llorar desconsoladamente. Odiaba esta sensación, la sensación de estar vacía, sin saber nada de mí misma. Sería mucho mejor si alguien me regalará, aunque sea, un abrazo, pero, por lo que se veía, estaba completamente sola.
Al cabo de un tiempo empezé a escuchar un sonido atronador, era como una sirena o una alarma, no lo podía reconocer del todo, y unas luces rojas inundaron la estancia. Entonces el ascensor paró en seco. Y noté como se abrían las puertas desde arriba. El sol me cegó por completo, y tuve que obligarme a taparme la cara con las manos. Noté como alguien bajó a la caja, pero por culpa del sol no podía ver de quien se trataba, aunque al no recordar nada, dudo mucho que lo fuera a reconocer.
Después de unos segundos levanté la vista y divisé a un chico rubio, pero también un poco castaño, alto, con unos ojos color café y una mirada hipnotizante. En si el chico se veía muy atractivo. Estuve analizándolo tan detenidamente que no alcancé a notar que me miraba con una cara de sorprendido a más no poder y no pude evitar soltar una risa floja. Al instante el sonrió, me pareció un chico amigable.
--Me llamo Newt. -Es lo primero que me dijo. Se agachó a mi altura y me volvió hablar.-¿Recuerdas tu nombre?
Justo al escuchar esa pregunta no pude evitar volver a derrumbarme y sentir esa sensación de vacio dentro de mí. Aquellas ganas incesables de que alguien me abrazara volvieron a mí, pero aún así me reprimí. Mis lágrimas amenazaban con salir de nuevo e intenté ahogar un sollozo pero fue en vano. Él lo notó e intentó tranquilizarme.
--Eh, no pasa nada. -Dijo levantando mi cabeza ligeramente con su mano en mi mentón.- Lo recordarás al poco tiempo, no te preocupes, sé que al principio es dificil pero te acabas acostumbrando.
Asentí y de repente escuché unos gritos que provenía desde fuera de la caja:
--¿Qué pasa Newt?
--Eso, Newt. ¿Por qué tardas tanto?
Newt me miró y dijo:
--Alby, baja.
Alby obedeció al chico y bajó. Lo que no me esperaba es que me mirara con cara de haber visto un fantasta. Esto ya me empezaba a preocupar, <<¡¿por qué cojones todos me miraban tan raro?!>> Miré a Newt con cara extraña y él me entendió.
--Mira, seguramente te será complicado asimilar esto pero... -Paró y miro a Alby, este asintó y Newt me volvió a mirar- eres la única chica que hay aquí. Y tendrás que convivir con más de 40 chicos.
Eso no me lo esperaba. Me asusté, he de admitir que me asusté. Pero que remedio. Tendría que estar muy alerta, por si las moscas.
--No te procupes, "verducha". -Dijo el más mayor, que se notaba que era Alby.-
<<¿Verducha, qué es eso?>> -Pensé. De todas formas asentí-.
--Chicos, ¿cuánto vais a tardar en subir? Tenemos ganas de ver al nuevo verducho. -Dijo burlón una voz que hablaba desde fuera-.
--¿Vamos? -Me animo el rubio-.
Salí de ese extraño asecensor gracias a una escalera que bajaron desde arriba. Subí y me encontré rodeada de montones de chicos que se encontraban entre sorprendidos y alegres, junto con Newt y Alby que subieron antes que yo.

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Hasta el final de los tiempos. (Newt y tú)
ФанфикYa había aguantado demasiado. Ya no podía más. C.R.U.E.L me arrebató todo lo que tenía, a mi madre, a mi hermano, a mis amigos, al amor de mi vida... Ya no quería seguir viendo como me arrebataban lo poco que me quedaba, no quería seguir sufriendo...