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VILLAMIL

- soy tan miserable - dije a mi amigo por la pantalla

Isa- Bueno si, pero no lo presuma, yo le dije que estuvo mal que le dijera eso ... sobre todo sabiendo que usted la

Villa- no - lo detuve - nada de eso

Isa- Bueno usted no la ama, pero las lágrimas, la desesperación y la angustia que le salían mientras pensaba que ella había muerto dicen otra cosa

Villa- cómo está marto - cambie el tema  - cómo lo lleva ?

Isa- no sé mucho, se fue a la finca, pero debe estar por volver para los ensayos de la gira

Villa- rayos lo había olvidado, no sé si Emilia está en condiciones de encargarse de Emma sola

Isa- y por que no las trae con nosotros, pasar el verano en España le podría ayudar, igual si quiere estar sola puede quedarse en el apartamento de madrid mientras Emma viaja con nosotros a los conciertos

Villa- esa está una gran idea Isaza, lo hablaré con ella... bueno perro gracias por oírme

Isa- sabe que siempre estoy aquí

Villa- supongo que se quedó dormida llorando una vez más - dije al ya no oírla

Isa- dígale que la queremos y a la enana también

Villa- yo le digo, nos vemos pronto perro

Emilia seguía muy deprimida por la pérdida de su amiga, me dolía mucho verla así pero me dolía más ver a mi hija quien sufría al ver a su madre.

Emma- mami no quiso comer otra vez papi - dijo triste Regresando el plato lleno de comida

Villa- eso veo pequeña

Emma- papi - se acercó a mi - y si pedimos a la tía Tania que vuelva ?

Villa- mi amor - la abracé - ya hablamos sobre eso

Emma- pero dijeron que la tía Tania está en el cielo

Villa- así es

Emma- entonces puede aterrizar como lo hace siempre, acaso no debe bajar a poner combustible ? - dijo inocente - quizá ahí mami y yo podamos verla ... la extraño mucho - agacho su cabecita

Villa- emma - la abracé

Mientras abrazaba a mi hija se escuchó un ligero quejido al mirar era Emilia pegada a la pared oyendo nuestra plática con una cara de gran dolor, moria por levantarme y abrazarla para poder consolarla pero yo sabia que ella no me lo permitiría

EMILIA

Un par de semanas habían pasado desde el accidente y debo confesar que mi dolor era tanto que de no ser por Emma y mi pequeño pistacho (bebé) no tendría otra razón para seguir respirando, Villamil seguía en casa y el solo verlo me hacía querer patearle las bolas, salí de mi habitación por algo de agua y me encontré a Emma en la cocina llena de harina de las galletas que ella y Villa habían preparado

Emma- Mira mami - mostró emocionada

Emilia- eso se ve muy rico nena - sonreí a mi hija

- ding dong - sonó el timbre

Emma- llegaron llegaron - corrió a la puerta - están aquí !!!

Emilia- esperan a alguien ?

Villa- son los chicos, espero no le moleste

Al Aire [ terminada ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora