Capitulo 908

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Narra Jimena 

Cuando supe la historia completa desde la boca de Emilio comencé a sentir que mi cuerpo se llenaba de una desesperación horrible, lo primero que sentía era como mi pulso se hacía como loco, la vista se me hizo borrosa y una necesidad de jalarme el cabello se adueño de mi, Emilio se paro corriendo y se puso a mi lado tratando de evitar que me hiciera daño, pero era tarde, la historia ya me había hecho pedazos adentro y lo que demostraba por fuera no era nada a la revolución que en mi pecho se sentía 

Emilio- Mi vida por favor, todo va a estar bien 

Jimena- No me dijiste que mi mejor amigo estaba en peligro 

Emilio- ¿Cómo podía decirte? mira como te pones, lo que menos quería era precisamente esto, por favor debes de entender 

Jimena- ¿Entender que Emilio? ¿Qué me hayas mentido? 

En ese momento paso lo imaginable, Emilio soltó mi cabello y me tomo de los brazos con mucha fuerza, exaltado me giro la cabeza para que lo mirara a los ojos, cuando tuvo mi mirada en esos flameantes ojos azules me puso contra la pared aun tomando con fuerza mis brazos 

Jimena- Emilio me haces daño 

Emilio no me hizo caso 

Emilio- Escucha bien Jimena, si tu te mueres yo me muero, Barraza nos declaro la guerra, yo solo quiero que estés bien ¿Es tan complicado entender que no te dije nada por que eres lo único que me provoca las ganas de respirar? no podía verte mal cada día pensando que ese animal mataba a una persona importante para ambos, Jimena te amo y te lo he dicho mil veces pero creo que no puedes entender el nivel en que lo hago, bueno ¿Cómo explicarlo? eres mi sol de cada mañana, la niña que despierta esa sonrisa cuando mas lo necesito, la que mejor me besa, la que me hace sentir único y completo, no podía pensar siquiera que te perdía

En ese momento sus ojos dejaron de ser tan oscuros, me mostraba su lado mas débil, mas sincero, sentí que en mi corazón algo ardía, dios sus ojos estaban llenos de lágrimas 

Emilio- Odio que la gente me vea llorar, te amo tanto que contigo no me importa desnudar mi alma ante ti, con que sepas la verdad de mis sentimientos esta bien 

Vi como comenzaba a soltarme, el sabía que ya se había ganado toda mi atención 

Emilio- Jimena, por favor, ya no estés enojada conmigo, te lo pido 

Jimena- Emilio 

Emilio- Dime 

Jimena- Estoy en shock 

Emilio- ¿Fui demasiado intenso? 

Jimena- No, es que, bueno siempre me habías dicho que me amas y eso pero, nunca me habías tomado de esa manera 

Mire mis brazos rojos de la presión, Emilio en ese momento se dio cuenta de los actos que había cometido por la desesperación, vi en sus ojos un arrepentimiento, lo conocía supe que se habla sentido muy mal por las marcas que había dejado 

Emilio- ¡Oh no Jimena! ¡Soy un tonto! 

Tomo mi brazo y en parte donde se marcaron sus dedos comenzó a acariciarme, al ver que no se quitaban las marcas otras lágrimas salieron, yo se las limpie 

Jimena- Ya no te preocupes Emilio, no me duelen 

Emilio- Lo siento

Emilio se dio la vuelta dándome ahora la espalda 

Jimena- Soy injusta contigo, se que no me ocultarías algo nada mas por que si, se que pretendías hacerlo con la mejor de las intenciones, pero soy tu esposa, quiero que estemos juntos en las buenas y en las malas, como el discurso lo dice, quiero representar ser tu esposa no solo cuando estamos felices, también cuando ambos nos queremos morir, cuando la paciencia se vaya, cuando lloremos de desesperación, en esos momentos también quiero ser tu esposa 

Emilio seguía en la misma posición 

Jimena- Pero ya que las cosas han cambiado y Boggi esta fuera de peligro lo mejor es que deje de pelearte por ello 

Emilio se giro para verme a los ojos 

Jimena- No me mientas mas Mili, no me gusta y esa era la razón por la que me sentía molesta, por que no pudo dejar de pensar en que me mentiste pero algo dentro de mi me dice que lo hiciste por mi bien. Estabas tan desesperado por que yo supiera que necesitabas que supiera tus razones que me tomaste así 

En ese momento Emilio me interrumpió, con un gesto de mano me dijo que parará 

Emilio- De todas maneras no debí de haberte tomado de esa forma ¿Qué demonios hubiera hecho si te hubiera hecho algún daño? 

Me acerque a el y ahora fui yo la que le tomo ambas manos 

Jimena- ¿Entiendes mi punto Emilio? 

Emilio dijo que si con la cabeza y apretó un poco mas mis manos, me miro a los ojos y 

Emilio- ¿Tu entiendes el mío?

Suspiré  

Jimena- Creo que ya puedo entender el todo 

Emilio- ¿Le damos fin a este tema por fin? 

Iba a responder pero en ese momento escuché como golpeaban la puerta muy fuerte 

Diego- ¡Mamá! ¡Papá! ¡Tengo mucha hambre! 

Solté una risa, me limpie las lágrimas que había provocado la discusión, Emilio hizo lo mismo 

Emily- También tengo hambre 

Diego- ¿Podemos pedir pizza? 

Jimena- ¿Crees que sean lo suficientemente inteligentes como para pedir una pizza? 

Emilio se rio y subió sus hombros 

Emilio- Aun no saben leer, esa es una gran ventaja 

Emily- ¡Mamá! 

Jimena- Mande hija 

Emily- Comida, por favor, que tenemos hambre 

Me reí todavía sosteniendo ambas manos de Emilio, Emilio me miro a los ojos 

Jimena- Debemos de darles de comer antes de que se pongan de mal humor 

Emilio- Pues si, son hijos tuyos 

Jimena- Muy gracioso Emilio 

Emilio- Pero un segundo, no me respondiste 

Lo mire a los ojos pero los portazos de esos cuatro pequeños puños me hacían que mi mente volará y dejará de concentrarme en mi esposo 

Jimena- Es un hecho, fin del tema 

Le di un pequeño beso en la mejilla y salí a darle de comer a mis dos clones 

PAZ :)))


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