Evitar pensarte es inútil para mí, en las noches siento que todavía estás aquí,
Aquí en mi corazón, ocupando un lugar, donde los cielos se visten de colores,
esperándote en un atardecer sin igual.
Perderte en la noche, la noche estrellada,
fue un martirio para mi alma encantada,
Sin más te fuiste de la constelación que de ti he creado, con versos de amor.
Carita preciosa, ojos felices,
deseo que vuelvas a mi alma en una noche triste.
Si no has de volver, ninguna estrella ocupará tu lugar,
porque dicho poema muerto estará.