En las viejas montañas crecen rosas con mil historias, las cuales los hombres han llevado a la gloria. En las viejas montañas sueñan como nunca los viajeros, cuyo ser se estremece al pensar en sus damas.
En las viejas montañas crecen las rosas a montones. Pocos son los caminantes, pocos son los que aman, pocos son quienes besos dan con amor y lágrimas.