Un día lindo

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Me desperté temprano, para compar ingredientes para hacerle desayuno a Naruto. Pague también a la posada para otro día y salí de ahí.

Después de hacer las compras, me dirigí al departamento de Naruto. Toque la puerta y se escuchó a lo lejos un "Ya voy..."

- ¿Quien es?...- Su cara con sueño se quito al instante al verme y cambió por una de alegría.

- Disculpa por venir a estas horas, quería desayunar contigo.- Alcé la bolsa para que la viera.- ¿Puedo pasar?

- Si!.- Se hizo a un lado y entre, el cerro la puerta.

- Disculpa la intromisión...

- Entra! Te enseñaré la casa.- Daba pequeños saltos.

- Si, no más dejo la bolsa en la cocina.- Después de dejarla me agarro de la mano y me enseñó toda la casa.

Desde su habitación, el baño y otra habitación que parecía para invitados, aunque era algo pequeña. No pensaba que el departamento de Naruto era tan grande, regresamos a la sala.

- Bien, ahora me pondré a hacer el desayuno, de mientras tu ve a lavarte la cara y cepillarte los dientes, también arregla tu cama.- Le acaricie el cabello.- Cuando termines el desayuno va a estar listo.

El solo asintió y corrió a hacer lo que le dije, a mi siempre me han gustado los niños, los bebés no, pero los niños si. Que no sean tan molestosos.

Me dispuse a hacer el desayuno, a mi me enseñaron sobre, "Desayunar como Rey, comer como príncipe y cenar como mendigo"

Un desayuno delicioso y saludable.

Me di la vuelta y Naruto venia llegando, orgulloso de haber hecho lo que le pedí.

- Ven ya vamos a desayunar.- Deje los platos en la mesa.- ¿Te salvaste las manos?.- El solo asintió.- Bien, entonces espero y te guste.

Después de comer, empezamos a platicar esperando a que baje la comida y así poder jugar.

- Disculpa, se me olvido preguntar tu nombre, pequeño.- Sonrei avergonzada.

- Mi nombre es Uzumaki Naruto.- Me sonrió.- ¿Cual es tu nombre?

- Yo soy _____, mi apellido no importa, ¿Que edad tienes Naruto?

- 3 años!.- Con su mano mostró 4 dedos pero al ver que se equivocó, bajo uno para finalmente mostrase 3 dedos.

- Que bien, el día de tu cumpleaños te traeré un pastel.- Le revolvi su cabello.- Así que crece bien

- Esta bien!

- ¿Que día cumples años?.- Lo mire.

- El 10 de Octubre es mi cumpleaños.

- Bien, aún tengo tiempo para elegir un regalo para ti.- Me dije a mi misma.- Ahora vamos a jugar!

- Sii

(...)

No salimos, nos quedamos ahí mismo y de alguna forma, nos divertimos, termine cansada y Naruto se quedó dormido.

No faltaba mucho para que oscureciera, le deje hecho el desayuno, solo debía sacarlo del refrigerador, no había necesidad de calentarse. Deje una nota y salí.

Sabia que en cualquier momento el Hokage me mandaría a llamar.

Algo se dirigía hacia mi con gran velocidad y lo esquive por poco. El kunai quedó clavado en la tierra, al instante me rodearon jounin, lo sabía por la vestimenta que traían.

- El Hokage quiere hablar contigo.- Sonrei.

- Parece que no conocen una forma más civilizada de llamar a alguien..

Lo empecé a seguir, por supuesto que caminando, aunque en el cuerpo donde estoy sabe sobre como andar en techos, yo apenas me estoy acostumbrado y quiero evitar un posible accidente.

Algo bueno es que no estaba tan lejos, entre junto a solo dos jounin, los demás se quedaron atrás.

Madre - Naruto Donde viven las historias. Descúbrelo ahora