Una Noche En Seúl

CAPITULO 1

- 1, 2 ,3, 4, 5 - Contaba mi primo mientras corríamos a escondernos. - 6, 7, 8, 9, 10. ¡listos o no, allá voy! - Ocultarme era de mis cosas menos favoritas, pero, no le puedes partir el corazón a un niñito y decirle que no quieres jugar. Terminé metiéndome debajo de la mesa del altar de día de muertos y ahí me quedé por unos diez minutos. Fue cuando oí a mi primito llorar porque no me encontraba y es por eso que tuve que salir.

- ¡Qué demonios le haces a mi hijo! - Gritaba mi tía. - Estábamos jugando a las escondidas y él no me pudo encontrar, por eso está llorando. -

Dijo no creerme y terminó llevándome frente a mis padres, los cuales, sin saber que pasaba en ese momento, le preguntaron que por lo que estaba sucediendo, por qué me estaba llevando de la oreja ante ellos. Fue tal vez el peor momento de ese día cuando me azotó en el suelo y les dijo a mis padres que había golpeado en la cara a su hijo.

Ya en el suelo me escupió y me pateó en la cara, mi padre, fue a parar los golpes que ella me daba. Aquello ocasionó más problemas, pues, mi tío se paró a amenazar a mi papá. Tuvimos que regresar temprano de la fiesta familiar para evitar problemas.

Para este punto tal vez ya se habrán dado cuenta que éramos los que nadie quería en la familia. ¿Por qué? Pues porque unos años antes murieron los abuelos y le heredaron casi todo a mi papá, es por eso que todos tenían rencor hacia él. Lamentablemente falsificaron el testamento y nos dejaron sin nada. Nos vimos en la necesidad de irnos de la Ciudad de México a la pequeña ciudad de Tuxpan, en el estado de Veracruz. Aun así, cada año asistíamos a la fiesta familiar con el único objetivo de seguir viéndonos con los primos de mi papá, los cuales, siempre lo apoyaron y eran muy buenos con nosotros. Sólo los podíamos ver en la fiesta pues, ellos vivían en Canadá y nada más en esas fechas venían.

- No te tienes que sentir así, nada ha sido tu culpa - Dijo mamá que siempre trataba de ver algo bueno a la vida.

Tomamos un camión que nos llevaría hasta allá. Pasamos a la plaza a comprar algunas cosas para la semana y fue ahí donde ocurrió algo que me marcó de por vida...

- Un barco norcoreano fue detenido en Isla de lobos por una patrulla mexicana. El buque asiático "Mu Du-Bong" y 33 tripulantes han sido detenidos y ubicados en el río Tuxpan. - Decían los noticieros locales.

Yo nunca en mi vida había oído hablar de ese país, pero el tema me interesó mucho y pues, empecé a investigar acerca de esto. Aún con sólo 10 años, todos los días veía videos y leía de la "Guerra de Corea" y de la "Guerra Fría", este hecho en realidad despertó mi amor por la historia universal y por las culturas asiáticas.

También empecé a estudiar la historia de Japón, de este país me enamoré enseguida.

Resulta que, mis sueños cambiaron de ir a la luna y a Marte, a ir a Seúl, Tokio, Beijing y poder pasar una noche en aquellas grandes y hermosas ciudades que me hacían soñar con grandes cosas.

Lamentablemente, mi situación económica no era lo suficientemente buena como para ir a aquellos países, y cada vez nos iba peor, por lo que decidí no renunciar a mis sueños y seguir estudiando, para ayudar a mi familia y de alguna forma poder cumplir mis sueños. Salí de primaria en 2019, con 9 de promedio, de la secundaria, salí con honores y beca, por lo que para la preparatoria decidí irme a la Ciudad de México y seguir mis estudios en donde se conocieron y enamoraron mis padres y recibí muy buenas recomendaciones de esta escuela.

Encontré un pequeño apartamento muy barato a media hora de la escuela, en una zona del Estado de México, mis papás no me podían llevar hasta allá, por lo que tenía que rentarlo.

Las primeras 2 semanas fueron un poco incómodas. Estaba acostumbrado a vivir en una pequeña ciudad, sin ruidos de autos a todas horas. Al final y como dice Darwin "El que no se adapta no sobrevive".