『 SeokJin es educador infantil y cuando uno de sus niños (quien tiene síntomas de abuso y desnutrición), es abandonado en la escuela con solo una nota decide que es momento de adoptar al pequeño, solo hay un problema... SeokJin se está divorciando...
SeokJin estaba sentado en la mesa de la sala de maestros de su propia guardería cuando Taehyung llegó a su lado con un pedazo de pastel.
"Claramente están en la fase de luna de miel." Expresó su amigo moreno.
Tae era psicólogo infantil pero eso no le quita su licenciatura en psicología en general.
"Solo espero que dure hasta que Gyu vaya a la Universidad." Bromea comiendo una cucharada del pastel para responder un mensaje de su esposo.
"¿Sólo apareció en tu casa hace un mes y volvieron a ser los mismos de antes del accidente?" Cuestionó su amigo, otra vez desde que Jin le contó la noticia.
"Somos más felices, tenlo por seguro." Señaló antes de volver al trabajo.
JungKook llegó tarde a casa, como siempre. Jin estaba en la cocina preparando la cena con su pequeño en una silla alta jugando con pequeños trastes de plástico pretendiendo ayudar a su madre con la tarea.
"Huele delicioso."
SeokJin se acercó a besar los labios de su alfa antes de servir la comida en dos platos de cerámica y uno de plástico con dibujos de los Backyardigans.
"¿Me extrañaste campeón?" Preguntó poniéndole en el cuello el babero que Seok le pasó.
"Dadda." Respondió el pequeño. Jin apenas notó cuando su pequeño comenzó a llamar así a su padre adoptivo.
"Dadda también te extrañó hoy en la oficina." Besó su frente y se sentó en la barra para ponerse a comer.
Con una sonrisa estúpida en la cara el omega comenzó a comer, Kook aún usaba un traje azul marino con camisa azul claro y corbata con diseño romboide, el cabello siempre lo tenía desaliñado ya que siempre jugaba con su cabello cuando leía. Cuando su alfa usó una de las servilletas para limpiar las mejillas de su cachorro sintió una cantidad enorme de amor que le recorrió cada parte del cuerpo llevándolo a la luz.
Después de cenar y meter los platos al lavavajillas metió a BeomGyu a la bañera para lavar su cabello, lo secó y lo puso en la cama. Solo bastaron unos cuantos minutos antes de que su cachorro se quedará totalmente dormido.
Regresó a su dormitorio y para su sorpresa el alfa ya estaba recostado leyendo un libro. Pensó en cómo sentía que nada había cambiado al mismo tiempo que se daba una ducha.
Mientras se secaba el omega observó la cicatriz que adornaba la parte baja de su vientre señalando el lugar donde alguna vez tuvo un cachorro cuya parte quedó infértil después de ese accidente. Se sacudió la cabeza pensando en que el destino ya había decidido que su bebé sería Beom, si no hubiese pasado por ello su pequeño ahora estaría abandonado en la calle o en servicios infantiles a la merced de un muy mal sistema de adopciones.
"¿Qué lees?" Preguntó metiéndose en la cama con su esposo.
"Un libro sobre padres." Dejó el material en la cama. "¿No crees que es extraño que Beommie solo diga pocas palabras? según este libro ya debería decir frases completas."
"Tae lo revisó hace poco, dice que casi no habla porque es tímido, no parece presentar ningún problema o enfermedad." Se dió la vuelta mirando a su alfa lucir preocupado por su cachorro.
"Tiene dos años y medio y aún no sabe ir al baño." Expresó. "Deberíamos comprar entrenadores y le enseñaré a ir al baño."
Jin no pudo ocultar la sonrisa y se recargó en el hombro de su alfa.
"Yo también puedo enseñar a nuestro cachorro a ir al baño." Se queja en broma olisqueando a su alfa.
"Es diferente, amor." Trata de darse a expresar.
"Siento que a veces olvidas que yo también tengo pene." Finge refunfuñar pero en el fondo está enternecido por la disposición y perseverancia de Koo al querer enseñar a su cachorro a ir al baño.
"No te ofendas pero es un mecanismo un poco diferente." Se quita los lentes para la vista cansada y se acomoda mejor en la cama. "Mi padre me enseñó a hacer esas cosas cuando yo era cachorro. Ir al baño, lavarse los dientes solo, rasurarse, salir de problemas, fueron cosas que me enseñaron a hacer mi padre y mi abuelo, y quiero que cuando mi hijo crezca y tenga una familia haga lo mismo por su hijo, quiero mantener la memoria de mi padre presente."
Las lágrimas comienzan a salir de los ojos de Jin, no son lágrimas de tristeza sino de felicidad y el alfa lo comprueba cuando el omega besa sus labios.
"Llamaste a BeomGyu tu hijo." Se limpia la nariz de una manera no muy elegante y asiente.
"Es mi hijo, amor. Desde el momento en que vine aquí y firmé esos papeles sabía que estaba comenzando una familia, al principio fue un poco estresante pero cuando Eun le entregó el primer muñeco que mi padre me compró supe que adoptar a Gyu iba más allá de nuestra felicidad, es mantener vivo el recuerdo de Jungwon."
Para el omega fue fácil comprender, fue en la quinta cita que JungKook le contó sobre sus padres. Aún estaban en la escuela cuando la hermana mayor de Kook nació, apenas habían cumplido la mayoría de edad cuando el alfa vino al mundo y Ji-Hyun desapareció tres meses después, lo dejó al cuidado de su suegra y no volvió hasta dentro de quince años, para la graduación de Eun.
JungKook fue criado por su padre y sus abuelos, debía de tener unos siete años cuando su padre murió en un accidente de trabajo, desde entonces y hasta los veinte años su abuelo fue la figura paterna que tuvo hasta que falleció por un paro cardíaco, la abuela de JK está internada en un asilo especial para personas con Alzheimer.
"Estoy de acuerdo en que pases toda tu sabiduría de alfa a nuestro cachorro a cambio de que yo le enseñe todo al próximo." Jugó con fuego esperando la reacción de Kook.
"Déjame disfrutar al que ya tenemos, omega." Bromea. "Cuando Beom comience a afeitarse comenzaremos todo de nuevo." Beso la frente de SeokJin. "Me gustaría tener un pequeño omega contigo, Jinnie." Sonríe.
Jin casi llora pensando en su pequeño Jungwon y la emoción en los ojos de JungKook cuando el obstetra les dijo que sería un omega.
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