✧*。fuck me, police ›¡𔘓! knowmin

ダム ❛ Capitulo ›› Dos

―Lo que haces está mal ―le dijo Minho sin quitar la mirada del camino mientras Seungmin lo apuntaba tranquilamente con el arma para que condujera donde él le ordenara.

―Lo sé ―suspiró pareciendo triste―, pero que se le va a hacer ―miró sus uñas y sonrió―, conduce y no hables.

―Hare que te pudras en la cárcel, Kim.

―Uhhh, sus palabras me encienden oficial Lee―soltó con un gemido de burla para luego reír.

―Joder ―gruñó―, yo haría que te incendiaras mocoso bastardo.

―Lastima que estas conduciendo ―deslizó su pequeña mano por la pierna de Minho hasta su entrepierna―, si no lo hubiéramos comprobado.

―Maldito niñato ―tragó saliva nervioso―, detente o te juro que...

―¿Qué? ―rió Seungmin travieso dándole un apretón a su pene, sintiendo como este crecía en su mano―, uhhh, estas muy contento.

―Desgraciado ―susurró en un jadeo, sintiendo como Seungmin movía despacio su mano.

―¿Quieres que te ayude?, seré amable por una sola vez contigo.

―¿Qué harás? ―preguntó pero no recibió respuesta, en cambio sintió como Seungmin bajaba su bragueta―. ¿¡Qué diablos haces!? ―preguntó soltando un gemido al sentir a Seungmin tomar directamente su polla.

―Cállate y conduce, te hare sentir mejor ―le guiñó un ojo y siguió masajeando el pene de Minho con su pequeña manita.

Minho era un manojo de espasmos y jadeos mientras Seungmin lamía de arriba a bajo su miembro, dejándolo húmedo y brillante. Escupió un poco en la punta y con su lengua lo esparció por todo el falo haciendo circulos con su lengua. Con su única mano libre tomó la base del pene y lentamente se lo fue engullendo, llegando un poquito más abajo de la mitad de aquel gran pene, mientras soltaba jadeos intencionales, enviando descargas eléctricas a la polla de Minho.

―Joder...M-Minho ―gimió tomando el cabello de Seungmin entre su mano derecha―, chocaremos por tu culpa...de-detente ¡ah! ―en vez de detenerse, Seungmin chupo con esmero la punta roja del pene y ahueco sus mejillas―, diablos, no pares bebé ―apretó más su agarre en el cabello de Seungmin y lo obligó a ir más abajo, causando arcadas que el peli-rosa controló a la perfección.

Minho mantenía su vista en la carretera conduciendo algo aturdido por el placer de la magnifica mamada que le estaba dando Seungmin. Tenían suerte de que la carretera a esas horas de la noche estaba vacía, de lo contrario ya hubieran chocado.

―Así bebé...más ―murmuró Minho controlando las estocadas―, la chupas como el mejor Seungmin ―halagó escuchando como Seungmin gemía en su pene―, joder, Kim, vamos cómetela toda.

Minho seguía susurrando palabras obscenas que extrañamente calentaban a Seungmin quien la calentura se las estaba cobrando y una erección se abría paso por sus apretados pantalones.

―Me co-correré ―Minho obligó a Seungmin a ir más rápido sintiendo como el nudo de su bajo estomago se intensificaba y su pene hinchado le avisaba que estaba a segundos de venirse―. ¡Ahh!...mmm ―una vez sintió su semen salir disparado, un suspiro de satisfacción salió de sus labios.

Seungmin un poco ahogado logró tragarse todo el semen de Minho y al separase lamió la punta dejándolo totalmente limpió. Miró a Minho con una sonrisa picara para luego relamerse los labios.

―Esto alimentara tu ego, pero ―suspiró metiendo con su mano el pene dentro de su pantalón y subiendo la bragueta―, me has dado la mejor mamada de todas.

―Lo sé ―lo apuntó de nuevo―, tienes un sabor muy bueno.

―Detente aquí ―dijo Seungmin mirando una vieja gasolinería en medio de la nada―, ahora escúchame ―lo miró serio―, no te irás a ningún lado, tampoco harás nada sospechoso y si le dices a alguien que soy y que estoy haciendo contigo te vuelo lo sesos, ¿entendiste?.

―Entendido ―levantó sus manos al aire en señal de paz, no quería admitirlo, pero algo dentro de él quería dejarse llevar por las manos de aquel pequeño pero ágil peli-rosa y ver si podía recibir otra de aquella gloriosa mamada y ¿por qué no?, quizás también un buen polvo.

Ambos se bajaron del auto aparentando tranquilidad, Seungmin guardó el arma en sus pantalones y dejó que Minho lo siguiera detrás de él, tratando de no levantar sospechas.

―Iré a hacer una llamada, sígueme y no digas nada a nadie ―le susurró Seungmin caminando hacia la pequeña cabina telefónica, ganándose las tres únicas miradas en aquel lugar. Un señor como de 60 años con un rifle en mano y una cara de culo más grande que el pene de Minho, quien de seguro cuidaba el lugar. Una mujer de 30 años con su acompañante de unos 35 quienes de seguro sólo venían por gasolina.

―Iré a llenar la patrulla de gasolina.

―En serio Lee, haces algo extraño y no dudare en darle un balazo a cada persona de aquí, incluyéndote.

―No sabes usar un arma.

―Créeme ―se acercó a su oído―, se usar el arma mejor de lo que uso mi boca ―lamió el lóbulo de la oreja de oficial y se separó dos pasos―, estas advertido.

Se giró y camino los pasos que faltaban para entrar a la pequeña cabina telefónica. Presionó unos botones y esperó que la llamada fuera atendida.

Miró hacia donde se encontraba Minho "llenando la patrulla", todo lo contrario a eso sólo estaba coqueteando con la tipa rubia quien de estúpida también le seguía el juego.

A Seungmin no le dio tiempo de arrugar su seño y pensar el por que eso le molestaba cuando la llamada fue atentida y una rasposa voz inundo su oído.

―¿Hola?.

―Changbin, amor ―Felix sonrió―, soy yo Seungmin.

―Bebé, ¿por qué me llamas de un teléfono público?.

―Cariño, la policía fue a casa ―miró a Minho e hizo una mueca, seguía coqueteando con la tipa.

―¿Estás bien? ―se oía bastante preocupado―, ¿donde estás? iré por ti y matare a todos.

―Tranquilo ―rió―, sabes que no soy un tonto y tengo al policía bajo mi poder ―escuchó como Changbin reía.

―Eres increíble, cariño.

―Necesito que vengas por mi, supongo que en la estación de policía ya están pensando en donde está su oficial con el preso ―sonrió―, así que ya sabes donde encontrarnos.

―En el viejo puente, frente a aquel lago.

―Exacto ―suspiró―, nos vemos luego cariño.

―Adiós mi príncipe, te amo.

―...También te amo.

Al colgar la llamada, Seungmin bajó la mirada y frunció el seño ¿qué estaba pasando con él? ¿por qué de repente le costo decir aquel te amo sin pensar que estaba mal?. En definitiva debía llegar pronto a los brazos de su novio, algo le estaba afectando.

Quizás un policía.

Gracias por leer<3