Chantajear

19 0 0
                                    

Había pasado un mes desde que Annika le había dejado de hablar a Ethan, no contestaba sus llamadas ni sus mensajes, tambien le había dejado en claro que no quería que la buscara en su casa, no lo quería ver o no hasta que ella piense bien las cosas acerca de su relación.

-Annika vamos no puedes aplazarlo para siempre- le dijo su amigo sentándose a su lado en una de las mesas de la cafetería del instituto.

-lo se pero no se como se lo tome- contesto annika, no quería enfrentar a su novio, sabía que todo se podia poner feo y no lo quería ver enfadado era una de las cosas que le daba miedo al estar con el.

-estas pensando en el pero también tienes que pensar en ti, por cierto ¿y tu almuerzo?- cambio de tema al ver que su amiga no estaba comiendo.

-no tengo hambre- Annika puso su cabeza en la mesa, tal vez si bajaba de peso su novio no se comportaría tan mal -además necesito bajar de peso-

-¡¿bajar de peso?!- esa respuesta le había tomado por sorpresa a su amigo haciendo que se atascara con su comida -no puedes estar hablando enserio, Annika no puedes bajar más de peso, te vas a enfermar además tu estas bien ¿para que quieres bajar de peso? No lo necesitas-

-es que Ethan me dijo que había subido de peso, entonces tal vez por eso me hace esas bromas-

-Annika escucha esa no es razón para que el te hagas esas bromas que si me lo preguntas no son bromas, no puede burlarse de tu peso, nadie debería y no estas gorda Annika, deberías de comer más, lo necesitas, te vas a enfermar- señalo preocupado su amigo.

Annika no sabia que hacer, no quería perder a su novio pero tampoco quería perder a su amigo, tal vez y Daniel tenía razón no podía dejar que eso siguiera, iba a terminar con su novio.

Cuando llego a su casa del instituto Annika se encontró con su madre, no sabia que ella estaba ahí y tenia miedo que siguiera ahí para la noche, si las cosas se ponían feas entre su novio y ella no quería que su madre se enterar, ella lo podía manejar sola o eso creía.

-mamá...- susurró annika captando la atención de la recién nombrada.

-¿que pasa princesa?- hablo su madre sin dejar de prestar atención a lo que estaba haciendo.

-¿vas a estar aquí en la noche?- preguntó annika entrado a la cocina para tratar de ayudar a su madre.

-no creo, ¿porque?, ¿Necesitas algo?-

-No, era solo para saber si tenia que preparar algo para comer, no te preocupes-

-¿porque no invitas a tu novio?- su madre apago el horno para ver a su hija con una sonrisa.

-¿Ah?- la pregunta de su madre la tomo por sorpresa.

-ya sabes tu padre y tu hermano trabajan y yo voy a estar donde tu abuela, así que porque no lo invitas para que te haga compañía y preparan algo para que coman juntos-

-ah si lo llamare y le diré- murmuró Annika, tal vez su madre tarde en irse  y ella tenga tiempo de arrepentirse de esto.

-bien ve y cámbiate para que comas- le dijo su madre acariciando su mejilla.

-esta bien- annika tomo su mochila y subió a su cuarto.

Cuando cerro la puerta de su cuarto Annika tomo su celular y abrió el chat de su novio, tenía varios mensajes donde le exigía que le respondiese o que le perdonara.

-Ethan porque tienes que hacer esto tan difícil-

No lo podía hacer se estaba arrepintiendo de eso, quería decirle que no quería seguir con eso pero pensaba que era mejor decirlo en persona.

~violentometro~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora