Papás solteros

21

Uhm, esto me duele :c 

pero equis, somos chavos :c (si votan y comentan, se los agradecería bastante)

A la mañana siguiente el primero en despertar fue Jackson, quien no lo dudó y llamó a Mark para que pase a buscar. Kihyun fue el segundo en despertar y junto a Jackson comenzaron a preparar el desayuno para los demás.

—Yo no desayunaré aquí —el omega avisó, sus ojos fijos en los platos —un amigo vendrá a buscarme.

Kihyun evitó hacer algún comentario al respecto, simplemente asintió en silencio.

Jackson se fue antes de que los demás despierten, por eso Kim se encargó de decirle a sus amigos que Jackson se había ido con un amigo.

El resto del desayuno fue silencio. Hyuna y HyoJong no podían creerlo.

La mañana de Seokjin había sido perfecta. Namjoon lo había despertado con el desayuno y tuvieron una charla muy tranquila con pequeños halagos por parte del alfa. Todo fue perfecto hasta que un mensaje en cierto grupo lo alertó.

—¿Crees que discutieron?

—Realmente no lo sé —Seokjin respondió, tan confundido como el alfa —Ellos nunca habían discutido antes, al menos no hasta el punto de no hablarse.

—¿Entonces?

—Hyuna dijo que Jackson no desayunó con ellos y ella afirma que pudo oler la tristeza en Jaebeom.

—¿Cree que entonces fue algo entre ellos dos? Quizás algo sucedió y ahora los demás están incómodos.

—No lo sé, pero Yoongi me mandó un mensaje, quiere que vaya a buscarlo.

Yoongi es el último en irse. Kihyun había llevado a todos a su casa, dejando que el omega menor y Jaebeom se queden juntos, sin poder mirarse.

Jaebeom tiene ganas de hablar, de disculparse, decir cualquier cosa para romper el horrible muro que se había formado entre ambos. A él no le gusta, no le gusta la idea de sentirse incómodo frente a su propio amigo.

Yoongi se planteó si hubiese sido buena idea irse con Kihyun, pero él ya le había pedido a su papá que fuera a buscarlo, no dejaría que conduzca en vano.

—Yoon.

El omega alza la mirada, conectando sus ojos con el azabache. Se forzó a sonreír.

—Dime.

—No quiero que esto sea incómodo, por favor, no lo hagamos incómodo.

—No sé de qué otra forma puede ser —susurró —intento no sentirme así, pero... —miró hacia todos lados, confirmando que los padres de Jaebeom no estén —te gusta mi padre.

—Pero no haré nada al respecto. Sé que es estúpido, ni siquiera tengo probabilidad de gustarle, lo sé, también soy consiente que estamos haciendo que él se relacione con el señor Kim Namjoon, lo entiendo.

—Pero te duele —Jaebeom calló —te duele, te estamos lastimando. Por la Diosa Luna, te obligamos a ayudarnos cuando estabas sufriendo por dentro, soy un pésimo amigo.

El alfa negó rápidamente, pero cuando vio la primera lágrima en su dulce amigo, no dudó en acercarse a él y abrazarlo.

—Hey, no, no es tu culpa, yo ni siquiera tendría que haberme fijado en él.

—Tú no-no puedes controlar eso.

Jaebeom negó mientras acariciaba el cabello castaño del omega. No, él no puede controlar eso, le encantaría poder decidir de quién enamorarse, se evitaría muchas cosas, como este momento, donde ve a su mejor amigo rompiendo en llanto, aferrándose a su brazo mientras se disculpa por no pensar en sus sentimientos cuando es él quien cometió el error.

—Por favor, ya nollores.

Namjoon mira con atención los movimientos lentos de su hijo. La forma en la que Kihyun se mueve por la cocina no es común, principalmente porque lo hace de una forma lenta y desanimada, perdido en sus pensamientos, sin ver lo que está tomando.

En otro momento se hubiese reído al ver a su hijo intentando freír una naranja, pero ahora sólo puede preocuparse, pensando en los mensajes que Hyuna había mandado. A eso le sumaba los mensajes de Seokjin, contándole que cuando fue a buscar a Yoongi, él y Jaebeom estaban llorando.

No sabe lo que está sucediendo y Kihyun no le contó nada, algo realmente extraño porque él siempre le cuenta todo.

—Ki, deja que yo cocinaré hoy.

Se acercó para apagar la estufa, pero se sorprendió cuando vio los ojos de su hijo rojos, con pequeñas lágrimas deslizándose en sus mejillas.

No dudó en abrazarlo, aunque no entendía nada, no pudo simplemente ignorarlo, su corazón no se lo permitía, su lobo menos.

Es su hijo, su pequeño cachorro.

—Se acabó, se terminó.

Namjoon cada vez entendía menos, pero no importaba, él simplemente siguió abrazando a su hijo con fuerza.

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